Un matrimonio de adultos mayores fue víctima de un violento robo automotor en Quilmes

"Parece una burla, los que me sacaron la cartera pasaron por la puerta de la comisaría para escapar". Las palabras de Mirta grafican los padecimientos que viven a diario los vecinos de Quilmes, un territorio arrasado por la violencia y la inseguridad, donde la policía se muestra impotente y con escasos recursos.

La noche del jueves, alrededor de las 23, la mujer y su esposo regresaban de una reunión familiar y fueron víctimas de un terrible robo a mano armada en la puerta de su domicilio, en la calle Río Gallegos.

"No se cuantos ladrones eran, para mi no paraban de bajar del auto en el que llegaron, creo que fueron cinco o seis", le contó Mirta a CRONOS. "Veníamos del cumpleaños de mi ahijada y como fuimos en la camioneta llevé la cartera y el teléfono celular, nunca llevo nada cuando salgo a la calle, pero ayer fue diferente, quería sacar fotos en la reunión", relató la mujer.

Luis estacionó la Ford EcoSport en la puerta de la vivienda, ayudó a Mirta a descender del rodado y ella, como un guiño del destino, lo esperó junto a la reja del garaje particular.

"Mi costumbre es bajar de la camioneta y esperarlo dentro de la propiedad con la puerta de la casa abierta. Ayer, no me preguntes porque, lo aguardé en la vereda junto al portón", indicó la mujer. "Cuando Luis iba a subir al vehículo para guardarlo, aparecieron estos tipos y frenaron de golpe. Si lo esperaba junto a la puerta quizá se metían en la casa", agregó.

Los violentos rodearon al hombre, lo encañonaron y le sacaron las llaves de la EcoSport.

"Todo pasó en un segundo y fue un griterío enloquecedor, ellos gritaban y también un vecino de la vereda de enfrente, no podían arrancar la camioneta y se pusieron peor", le aseguró Mirta a CRONOS. "Creo que en un primer momento nos vinieron a robar lo que teníamos encima, no sabían que el vehículo es nuestro", añadió.

Varias horas después de haber ocurrido el violento incidente, la mujer asegura que no puede dejar atrás el miedo y la angustia que le provocó el siniestro momento.

"Somos gente mayor, los dos sufrimos hipertensión y a Luis le colocaron dos stent hace seis meses. Mi nuera es doctora, un rato después me tomó la presión y llegó a 20", declaró la mujer.

La camioneta fue recuperada horas después en un descampado de la localidad de Bosques, en el partido de Florencio Varela, porque tiene rastreador satelital.

"El teléfono me lo bloqueó la empresa de telefonía para que no lo usen, pero los ladrones me generaron un gran problema porque tenía recetas digitales de medicamentos que tomo a diario. En la cartera tenía remedios y el carnet de PAMI, cosas que necesito sí o sí, ahora tengo que pedir ayuda a la familia para hacer todos los trámites que se hacen online", describió Mirta.

Los violentos escaparon con los dos vehículos y en direcciones contrarias, uno de ellos pasó por la puerta de la cercana Comisaría 6ta. de Ezpeleta, sobre la calle Cuenca.

"Luis hizo la denuncia pero sólo a él le tomaron declaración, a mi no. Cuando fuimos a la seccional había un solo patrullero y solo vi dos policías, así es difícil que nos puedan dar seguridad y que terminen con esto que nos está matando. Yo estoy transitando un cuadro depresivo por otras cosas, ahora ya no quiero salir más a la calle", le aseguró Mirta a CRONOS.