Efecto Milei: se reconfigura la disputa por la presidencia de la Cámara de Diputados bonaerense

Con la victoria de Javier Milei y, por consecuencia, la derrota de Unión por la Patria, el peronismo deberá dar un giro de 180 grados y rearmarse en la provincia de Buenos Aires. En ese sentido, su primera decisión deberá orientarse a definir el sucesor de Federico Otermín en la presidencia de la Cámara de Diputados.

Según pudo saber CRONOS, hasta antes del balotaje, en caso de ganar, Sergio Massa quería ese sillón para su espacio. El nombre que sonaba era el del diputado, Rubén Eslaiman.

No obstante, la derrota del oficialismo significó un duro golpe para el massismo, lo que generó que un sector del peronismo bonaerense le pida a Kicillof que decida él al próximo presidente de la Cámara Baja. En ese marco, lo ven como el principal opositor en Nación y el unificador del justicialismo nacional.

Desde el kicillofismo estiman que el gobernador bonaerense no busca pelearse con Massa, aunque está temeroso de que pueda condicionarle su segundo período en la Provincia, a partir de la importancia que tiene el Frente Renovador en el territorio.

Asimismo, Kicillof no se muestra tan preocupado por definir al sucesor de Otermín y no pondría reparos en seleccionar a un integrante de La Cámpora o del massismo. De igual forma, un nombre que surgió en las últimas horas fue Carlos “Cuto” Moreno, del riñón kicillofista.

Sin embargo, el mandatario provincial es consciente de que el kirchnerismo duro, e incluso el massismo, pondrá condiciones a cambio. Por ejemplo, lugares en el Poder Ejecutivo bonaerense o la presidencia del Partido Justicialista, hoy a cargo de Máximo Kirchner.

Otro nombre que surgió para ocupar la presidencia de la Cámara Baja fue el de Lucia Iañez, referenciada con Julio Alak (intendente electo de La Plata). No obstante, fue rápidamente dada de baja y se presume que el motivo fue la reunión del funcionario bonaerense con Cristina Kirchner, que no cayó bien en el entorno de Kicillof.

En ese sentido, la guerra comenzó oficialmente en el peronismo bonaerense, seriamente perjudicado con el triunfo de Milei en el balotaje. La presidencia de la Cámara de Diputados será uno de las tantas cuestiones que el kicillofismo, La Cámpora y el massismo deberán ponerse de acuerdo para gobernar en paz a la Provincia.