4 nov 2025
En la noche del lunes la empleada de un almacén que regresaba a su domicilio en el barrio Alcorta, en el descontrolado partido de Moreno, fue interceptada por un rastrero que la amenazó con un arma de fuego y le robó las pertenencias.
Amigos de la joven recuperaron la bicicleta que le sacó y poco después, cuando fueron a buscar el teléfono celular, amigos y familiares del ladrón los echaron con pedradas y los amenazaron con un rifle.
Todo comenzó alrededor de las 23:30 cuando la muchacha acabó la jornada laboral y se dirigía a su vivienda por la calle Sáenz Peña en bicicleta. Antes de llegar a la intersección con Centenario, un bicichorro se le cruzó en el camino, la amenazó con un arma de fuego y le exigió que le entregue el rodado y el teléfono celular.
"Hace pocos meses que está trabajando y, con los primeros sueldos, ahorró para comprarse la bici y el teléfono que tenía hace tres días", le aseguró una tía de la joven a CRONOS.
En el video incluido en esta nota se observa que la joven escapó a la carrera y el malandra se alejó en dirección al Río Reconquista con los dos vehículos.
"Amigos de mi sobrina observaron la situación a la distancia y lo persiguieron hasta que abandonó la bicicleta que había robado y escapó hacia el barrio nuevo que pertenece al partido de Merlo y está cruzando el puente de la calle Emilio Mitre", relató la mujer.
Los jóvenes le llevaron el rodado recuperado a la joven y en ese momento se enteraron que también le había robado el teléfono comprado el fin de semana.
"Fueron a buscarlo al barrio donde se había escondido pero cuando se acercaron los recibieron con cascotazos y botellazos, también un hombre salió con un rifle y les apuntó para que se vayan", aseguró la tía de la joven asaltada. "Los chicos fueron a buscar ayuda en el Puesto Policial que esta a pocos metros y no había nadie", agregó.
Los hechos de inseguridad son habituales en la esquina donde le robaron a la joven: la noche del viernes 24 de octubre delincuentes armados coparon una fiambrería ubicada a 20 metros y se llevaron hasta la máquina para cortar fiambres. (Ver Robo en una fiambrería de Moreno )
"Si recorres el barrio vas a observar que el 30% o 40% de las viviendas están en venta. Gente que nació acá y vivió 40 años, toda su vida, se tuvieron que ir por la inseguridad. Hay uno o dos móviles para patrullar tres barrios, así es imposible que nos den seguridad", denunciaron los vecinos.
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