Axel Kicillof, gobernador de la Provincia de Buenos Aires, obtuvo una gran noticia para su gestión el pasado jueves. El Proyecto de Ley para la creación de un Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) Provincial fue aprobado por el Senado bonaerense.
El gobierno provincial obtuvo la luz verde para avanzar con la iniciativa impulsada por Ministerio de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica bonaerense para contrarrestar la política impulsada por el Gobierno Nacional de Javier Milei.
Sobre la aprobación, el gobernador expresó: “En cada uno de los artículos de esta ley está la vocación del Gobierno provincial de acompañar a quienes generan trabajo y valor agregado, impulsar el desarrollo económico con una mirada soberana y actuar como un escudo contra las políticas nacionales de desindustrialización”.
“Agradezco a las y los legisladores de los diferentes bloques por acompañar este proyecto fundamental para que la provincia siga siendo, aun en estos tiempos tan difíciles, el corazón productivo de la Argentina”, agregó el mandatario bonaerense.
En esa línea, cabe recordar que el gobierno provincial describió al RIGI como una “herramienta que tiene como objetivo estimular las inversiones productivas y que, a través de beneficios fiscales, premia a aquellos proyectos que impliquen la creación de empleos de calidad, la generación de valor agregado, el desarrollo de proveedores locales y de nuevos sectores productivos”.
Hace algunos meses, sobre dicha iniciativa, Kicillof explicó: “Esta iniciativa está en las antípodas del RIGI que impulsa el Gobierno nacional: nosotros no podemos aceptar que la única forma de recibir inversiones sea la de primarizar, rifar los recursos naturales y no agregar valor. Por el contrario, este es un proyecto de desarrollo económico e industrial”.
Por su parte, Augusto Costa, ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica bonaerense, había explicado: “Este Régimen Provincial pone el impacto productivo, económico y social por delante del beneficio”.
“Van a poder acceder a las ventajas impositivas aquellos proyectos que demuestren que van a generar más valor agregado en la provincia, más empleo, innovación tecnológica, mejoras en cuestiones de sustentabilidad ambiental, de género y sustitución de importaciones y mayores exportaciones”, agregó Costa.

Las propuestas aprobadas tendrán exenciones fiscales parciales sobre los impuestos de Ingresos Brutos, Inmobiliario y de Sellos. Los proyectos con inversiones desde US$5 millones hasta US$50 millones podrán acceder a un 30% durante 5 años; mientras que para aquellos que tengan una inversión de entre US$50 millones y US$200 millones el beneficio alcanzará un 25% de exención durante 4 años. En el caso de las inversiones de más de US$200 millones, la exención será del 20% durante 3 años.
Asimismo, podrán obtener beneficios adicionales por sobre esas exenciones aquellos proyectos que incrementen el empleo, permitan la sustitución de importaciones; potencien la innovación tecnológica; o se localicen en zonas de bajos ingresos o parques industriales.
En este caso será de 10% y 2 años más de plazo; mientras que los proyectos que aumenten las exportaciones, adopten políticas de género o de sostenibilidad ambiental podrán acceder a un 5% extra de exención y 1 año más de plazo.
La estabilidad fiscal abarcará el período de los beneficios otorgados y podrá extenderse hasta 30 años si cumple las finalidades del Régimen. Además, los proyectos de inversión mayores a US$50 millones deberán presentar un programa de desarrollo de proveedores, el cual deberá contemplar, de forma incremental, que al menos el 50% del monto total destinado al pago de proveedores se dirija a la contratación de empresas radicadas en la Provincia de Buenos Aires.