En medio de la crisis económica que enfrenta el país, la población argentina ha observado con malos ojos que los políticos se aumenten su sueldo. Lo sucedido en la ciudad bonaerense de General Alvear con su intendente Ramón Capra no fue la excepción y se vio obligado a dar marcha atrás con la suba salarial del 50% que se había concedido.
Mediante un comunicado, el bloque local de Unión por la Patria señaló que el incremento salarial del jefe comunal y sus secretarias de Gobierno y Hacienda era superior al 20% acordado para los empleados municipales.
En ese sentido, señalaron que el alcalde bonaerense decidió aumentar el “gasto de representación” en un “25% de su sueldo”. Por tanto, “pasó de 30 mil pesos a 840 mil pesos”, a eso corresponde agregar el 20% de incremento salarial y da un sueldo total “de más de 4.2 millones de pesos mensual”.
“El intendente reconoció que el aumento de los trabajadores en 2024 fue del 72%. El aumento que recibió Capra y sus dos secretarios en este 2024 supera el 120% acumulado”, afirmaron más tarde.
El revuelo que terminó generando esta noticia en el distrito obligó a Capra a arrepentirse de otorgarse una suba salarial y explicó que “ni él ni sus funcionarias cobrarán el aumento de gastos de representación y bonificación”.
“No voy a entorpecer el aumento a los trabajadores y jubilados municipales, los gastos de representación de este intendente seguirán siendo de 30.000 pesos por mes”, resaltó ante los medios locales.