Conurbano descontrolado: le robaron la moto, pagó "un rescate" y se la devolvieron para armar

En la tarde del lunes una motoquera identificada como L., padeció el violento robo de su moto en la Ruta 3.

Alrededor de las 18:20, cuando terminó la jornada laboral y se dirigía a estudiar a bordo de su Honda CG Titán, fue sorprendida por cinco delincuentes que se movilizaban en auto color negro.

Los sujetos aprovecharon que la joven esperaba la luz verde del semáforo para girar a la izquierda y le cruzaron el automóvil.

Uno de los sujetos abrió la puerta del acompañante y empuñando un arma de fuego amenazó a L. para que le entregue el rodado.

A pesar que juntar el dinero para adquirir la moto le llevó mucho tiempo y sacrificios, la joven no se resistió y la tiró al pavimento antes de correr detrás de un camión para cubrirse y no ser baleada.

Sin perder tiempo el delincuente se subió a la moto y seguido por el auto en el que viajaban los cómplices, escapó en dirección a la localidad de Virrey del Pino.

La muchacha realizó la denuncia policial y algunas horas después compartió su padecimiento en las redes sociales. No pasó mucho tiempo para que reciba un mensaje que la llenó de bronca e impotencia.

"Si queres la moto tenes que pagar 600 lucas", le escribió un delincuente.

Por lo general este tipo de contactos son estafas: los embaucadores, con perfiles falsos en las redes sociales, se ocupan en buscar posteos de víctimas que denuncian un robo y ofrecen recompensas para recuperar los vehículos. A continuación las contactan y piden dinero para brindar información que en realidad no tienen, o fuertes sumas para devolver el bien robado.

L. se dirigió a la comisaría donde denunció el asalto y cuando brindó la información del lugar en el que se encontraba la moto, los policías le respondieron que no la podían ayudar: "hay que esperar a que avance la investigación y que la Justicia de la orden, el vehículo está en una zona muy peligrosa", le aseguraron.

A través de gente que su novió conoce en el barrio Nicoll, la desesperada joven contactó a los que tenían la moto y como en un mercado oriental donde se regatean los precios con los comerciantes, la chica "les peleó" el precio del rescate.

"Les ofrecí todo lo que tenía, 400 mil pesos", le aseguró L. a CRONOS.

Los delincuentes accedieron y a través del contacto en común se realizó el intercambio.

"Les mandé el dinero y ellos me devolvieron la moto desarmada. Ahora debo ahorrar dinero y pagarle a un mecánico para que la arme y deje en condiciones para que la pueda usar", se lamentó la joven que por varias semanas no tendrá su herramienta de trabajo.