jueves 25 de abril de 2024 - Edición Nº2765
Cronos Noticias » Municipios » 19 dic 2018 14:34

Costumbre platense

Muñecos de fin de año en La Plata: una tradición que se pierde y el rol de la Municipalidad

Los momos inscriptos para la quema de Año Nuevo en la capital provincial no llegan a 100 en 2018 y registran una baja consecutiva durante los años de gestión de Garro. Cuáles son los motivos y qué lugar ocupa la comuna.


  • Muñecos de fin de año en La Plata: una tradición que se pierde y el rol de la Municipalidad

COMPARTIR ESTA NOTICIA

A pocos días de que termine el 2018, la municipalidad de La Plata dio a conocer la cantidad de muñecos inscriptos para la tradicional quema que se realiza el primero de enero en las primeras horas de la madrugada. 

Según informó la comuna, los momos anotados en el registro son sólo 75, pero eso luego de extender el plazo, ya que en principio solo eran 55; un número muy bajo considerando que se trata de una histórica tradición platense.

Si bien el 2018 fue un año atravesado por una fuerte crisis económica, los datos muestran que la cantidad de momos inscriptos en la ciudad de las diagonales ha caído consecutivamente durante los tres años de gestión de Julio Garro. 

En 2015, cuando el actual intendente llegó al municipio y cursaba sus primeros días como jefe comunal, la cantidad de muñecos anotados en el registro fue de 120. Al año siguiente, en 2016 ese número había bajado a 101. Finalmente, tanto en 2017 y 2018, los muñecos inscriptos fueron 75 – aunque, como ya se dijo, en este año se alcanzó ese número tras extenderse el plazo. 

En ese sentido, el rol del municipio fue clave a la hora de la pérdida de esta tradición tan platense, según consideran los propios jóvenes que arman muñecos. Aseguran que las normas son "muy rígidas y antipáticas". “Te sacan las ganas de todo”, afirman. 

La municipalidad establece como obligatorio para anotar un momo que no se exceda los 6 metros de alto, 3 metros de ancho y 3 metros de largo y que su instalación debe contemplar un radio de seguridad de tres veces su altura.

Además, se pide que los muñecos sean instalados en ramblas de avenidas, evitando cableados, arbolado público, bocas de expendio de combustible y calles transitadas por transporte público; y se prohíbe el uso de pirotecnias o explosivos en el interior de los momos. 

Para los vecinos de la ciudad que disfrutaban de la costumbre de juntarse todos los diciembres a construir estos muñecos y verlos quemarse en las primeras horas del nuevo año, son demasiadas las reglas que impone el municipio. “Los que se encargan de hacer las normativas estas jamás hicieron un muñeco. No saben de qué se trata, pero te hablan como expertos”, reclaman. 

De esta forma, con tantas normas y restricciones, la ciudad de La Plata de a poco va perdiendo una tradición que la identificada y por la que era conocida en el resto de la Provincia. 
 

TE PUEDE INTERESAR

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:

VIDEOS