En un atípico cierre de listas, Fuerza Patria logró sobrevivir al armado pese a negociaciones y tensiones que ocurrieron hasta último momento entre ellas, los pedidos de la exvicepresidenta Cristina Kirchner, los "candidatos testimoniales" del gobernador Axel Kicillof y las presiones de La Cámpora que tendrá más lugares en la boleta peronista.
Cabe recordar que los dirigentes alineados al Movimiento Derecho al Futuro (MDF) de Kicillof continúan con disputas internas con el sector cristinista ligado a La Cámpora, ya que el Gobernador pretende conformar la Legislatura bonaerense de representantes que aprueben las iniciativas “sin chistar” para evitar lo ocurrido en la sesión por el Presupuesto 2025 y concluir sus últimos dos años de mandato en paz.
Durante la noche del sábado, la postura de la expresidenta fue clara, evitar las especulaciones sobre “candidaturas testimoniales” y poner a Federico Achával (Pilar) y Mariano Cascallares (Almirante Brown) como cabezas de listas en la Primera y la Tercera respectivamente. Sin embargo, en el kicillofismo aseguraron que tanto el ministro Gabriel Katopodis como la vicegobernadora Verónica Magario tenían buena imagen.

Ante estas negociaciones y la noticia de la prórroga del cierre de listas, Cristina cedió y le dejó a Kicillof encabezar con sus dos candidatos en ambas secciones, las más populares de la provincia de Buenos Aires. Pero, no todo fue color de rosas para el Gobernador.
El reparto final entre los 29 lugares que podría obtener la Fuerza Patria quedó con más lugares para La Cámpora en vez de lo que proponían desde el kicillofismo, de hacer un reparto más equitativo. Es decir, el MDF pasó de compartir 11 lugares entre ambas fuerzas, a perder dos y La Cámpora quedarse con 15 lugares, sumándose otras dos del Frente Renovador.
Así, la situación que atraviesa Fuerza Patria por la distribución de los lugares parece no tener fin y los rencores aumentan sumados a las dos posturas dispares que tensan al peronismo bonaerense. Por un lado, el pedido de la lapicera por la gestión provincial y, por el otro, el reclamo por el lugar que ocupa Kicillof, que desde el sector que responde a Máximo Kirchner, aseguran que se lo dio la expresidenta, con sus votos.