Poco después de que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) difundiera números oficiales en torno a la pobreza y la indigencia en toda la Argentina, ministros del Gobierno de la provincia de Buenos Aires hicieron eco y criticaron al presidente Javier Milei por el relevamiento.
El Índice de pobreza alcanzó al término del primer semestre del año al 52,9%, por encima del 41,7 % de finales del año pasado, y del 40,1% de enero-junio del 2023.
En tanto, la indigencia, entendido este como los pobres cuyos ingresos no son suficientes ni siquiera para comprar la cantidad mínima de comida que permita la subsistencia, se ubicó en 18,1%. A finales del año pasado había trepado al 11,9%, y entre enero y junio del 2023 se ubicaba en 9,3%
"La pobreza alcanzó el 52,9% en el primer semestre de Milei, un incremento inédito de casi 13 p.p. vs el 1° semestre del 2023", dijo el ministro de Economía, Pablo López. Asimismo, añadió: "Con un aumento tan abrupto, este es un nivel de fragilidad que no veíamos desde 2004, sumando casi 4 millones de personas a la pobreza en menos de un año".
Además, indicó que el modelo actual "privilegia al sector financiero mientras castiga a las y los trabajadores por doble vía, la baja de los ingresos reales y la destrucción de puestos de trabajo". Luego, sostuvo: "Debemos encontrar un modelo de crecimiento que tenga como centro más y mejor producción, no menos".
Por su parte, el ministro de Trabajo Walter Correa, expresó a través de sus redes sociales que la única verdad "es la realidad". Entonces, remarcó: "La gran devaluación de diciembre impuesta por Milei, el fuerte ajuste fiscal, la creciente desocupación, tarifazos y la no entrega de alimentos, generaron 5.4 millones de nuevos pobres y 3 millones de nuevos indigentes en el primer semestre del año"
También Gabriel Katopodis, ministro de Infraestructura y Servicios Públicos, reflejó críticas. El exintendente eligió recordar una frase de Milei en la que aseguraba que es "economista libertario, especialista en crecimiento económico, con y sin dinero".
De acuerdo a los datos del Indec, dentro de una población de 46 millones de habitantes, 24,3 millones son pobres, y entre ellos 8,3 millones no tienen el dinero mínimo para adquirir la comida que garantice la subsistencia.