El partido de Merlo es uno de los más violentos e inseguros del Conurbano bonaerense, los robos de vehículos y entraderas son cotidianos, también la actividad de rastreros que recorren las diferentes localidades en moto y atacan a todos los vecinos que se cruzan en cualquier momento de la noche y del día.
Esta semana las cámaras de vigilancias instaladas en comercios y viviendas registraron dos asaltos callejeros con la modalidad motochorros.
Robo 1
En la noche del martes, cerca de las 22, un hombre que realizaba una compra en un almacén de Parque San Martín, fue abordado por dos delincuentes que portaban al menos un arma de fuego.
Los delincuentes se movilizaban en una Rouser color negro, indicó Merlo Real, y el que viajaba como acompañante se acercó a la víctima que compraba, desde la vereda, en un enrejado comercio ubicado sobre la calle Patricias Argentinas al 1100.
El ratero se paró a varios pasos del hombre, le exhibió un arma de fuego y le exigió las pertenencias.
En el primer momento la víctima se negó a cumplir con la demanda y se deshizo de los objetos de valor que cayeron en el interior del comercio. Al observar la maniobra el malandra amagó con retirarse pero regresó y lo amenazó para que le entregue la campera.
Sin posibilidad de resistir el hombre le dio el abrigo para que se aleje.
Instantes después, cuando el cómplice aceleraba en dirección a la calle Fleming, el cobarde le apuntó con el arma a un automovilista que llegaba hasta el lugar.
Robo 2
Dos alumnos del Colegio Piedrabuena de San Antonio de Padua que el mediodía del lunes se dirigían a sus domicilios, fueron asaltados por un solitario motochorro que los sorprendió por la espalda.
Los chicos caminaban por la calle Pueyrredón al 600, a pocos metros de la institución escolar, cuando el delincuente frenó junto al cordón de la vereda y les ordenó que le entreguen los teléfonos celulares.
La chica le aseguró que no tenía y el muchacho, sin opción y con miedo de ser lastimado, entregó el dispositivo.
Desde la comunidad educativa afirmaron que en las últimas semanas se produjeron varios hechos con estas características y reclamaron por la ausencia de personal policial que garantice la seguridad de los chicos.