Aguas Bonaerenses S.A. (ABSA) anunció que para el mes de julio de 2024 aplicará un nuevo incremento a su servicio, el mismo impactará en 90 localidades de todo el territorio de la provincia de Buenos Aires y se trata de una suba complementaria al que llegó en mayo, con un ajuste del 200%.
De esta manera, a partir del mes entrante la boleta tanto para el servicio no medido (la gran mayoría) como para el servicio medido completará un aumento del 350% desde que comenzó el año.
A partir de julio, el valor del módulo o metro cúbico subirá un 50% y con ello llegará a $72,54, incrementando la factura promedio a $3.656,62 mensuales.
El ajuste, según indicaron las autoridades de la empresa, responde a la creciente inflación, la devaluación implementada por el Gobierno nacional en diciembre pasado y el congelamiento de las tarifas del servicio que no sufrieron aumentos durante el último año y medio.
A cuánto se van las tarifas
Tras confirmar el incremento, ABSA detalló cuál será el impacto real entre los usuarios de su servicio. Según se indicó, en esta segunda etapa de ajuste tarifario "el 47,4% de los usuarios tendrán un aumento de menos de $1.000 mensuales, el 41,5% de entre $1.001 y $2.000, el 8,7% de entre $2.001 y $3.000, y el 2,4% de más de $3.000”.
Por otro lado, la empresa explicó que su servicio alcanza a 62 municipios, más de 90 ciudades, cerca de un millón de usuarios y además este ajuste está por debajo de la inflación acumulada desde fines de 2022, cuando se registró el último incremento.