El PRO y otra interna a cielo abierto
La semana que pasó el Palacio legislativo provincial tuvo más de una noticia que traspasó las fronteras de la Provincia de Buenos Aires, para llegar a ser noticia nacional.
La nueva sangrienta interna que protagoniza en PRO a cielo abierto, tuvo una batalla feroz en la Legislatura. En respuesta al “autogolpe” (Patricia Bullirch dijo que fue un “golpe de Estado”, pero bue) y el vaciamiento del Consejo del PRO bonaerense, que Cristian Ritondo organizó por orden de Mauricio Macri, “Pato” -en complicidad con el mediático intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela- mandó a romper los bloques amarrillos en Diputados y Senadores.

El estallido fue portada de medios digitales bonaerenses y nacionales. Otra vez las internas del PRO. “No es buen momento para pelearse”, “los quilombos vienen de arriba”, “Así terminamos como furgón de cola de los libertarios”, fueron las reflexiones que legisladores amarrillos confesaron a CRONOS, café de por medio o en los pasillos legislativos.
El surgimiento del bloque “Pro-Libertad”, dejó al Pro “oficial” un tanto debilitado. En Diputados, se llevaron cinco bancas (nada despreciable): Florencia Retamoso, Abigail Gómez, Oriana Colugnatti, Sofía Pomponio y Fernando Compagnoni. En el Senado la fuga fue una sola: Daniela Reich, aunque en la Cámara Alta, un voto vale por diez muchas veces. Sin embargo, los “Libertarios Blue”, como los llaman con burla en los pasillos de la Legislatura, se fueron sin las arcas y el poder que los amarrillos negociaron con Alejandro Dichiara y Verónica Magario a principios de año.
“Se van, pero no se llevan nada”, destacó molesto un legislador amarrillo. La maniobra se completó con la renuncia de Reich a la Vicepresidencia 2° del Senado, el pedido de renuncia a Compagnoni al sillón que ocupa en el Consejo de la Magistratura bonaerense y el lugar que ocupa en el directorio del Banco Provincia, el bullrichista Santiago Nardelli. “No están más en el bloque PRO original, tienen que renunciar. Esos lugares son es del bloque PRO”, bramó otro legislador.
Se pudrió todo en el PRO y los oráculos políticos anuncian que la guerra continuará y abierta para todo público. En rigor, lo que se juega no es la autonomía del PRO o su supervivencia ante la amenaza de La Libertad Avanza de Javier Milei. Se trata de quien tiene la lapicera (si es que Milei acepta) para negociar y ubicar nombres propios en el Gobierno Nacional y, en todo caso, ubicar lugares entrables en las listas legislativas del 2015, en una hipotética alianza con los libertarios. Paradojas de la política, la suerte del PRO se asemeja bastante a lo que fue la de la UCR en tiempos dónde los amarrillos tenían el poder.
El dato de color, o no tanto, es la disputa (que puede transformarse en legal) por el uso de la marca "PRO".
El massismo suma otro disgusto con Kicillof
Para no quedarse atrás en la hora de las internas abiertas, Unión por la Patria sumó otro capítulo de las diferencias que hay entre los espacios que aún la integran. La necesidad del otro hace que la convivencia sea necesaria, pero no por eso ajena a descontentos.
Es que una jugada del naciente “kicillofismo” en el distrito de Roque Pérez, que gobierna Maximiliano Sciaini, desató el enojo de todo el Frente Renovador, con amenazas de rupturas que se hicieron eco en los medios bonaerenses.

Siempre activo y controvertible, el exintendente y asesor de la Gobernación ligado a Carlos Bianco, Juan Carlos “Chinchu” Gasparini, orquestó -junto el PRO local- una maniobra polémica para quedarse con la presidencia del Consejo Deliberante, con su bloque nada disimulado “PJ Axel Conducción”. La movida despertó la airosa reacción del Frente Renovador. Por orden de Sergio Massa, el ahora vicepresidente de Diputados de la Provincia y exministro nacional, Alexis Guerrera salió advertir que si esa jugada “se iba a repetir en otros Concejos” donde gobierna el massismo, la carta de ruptura de los bloques del oficialismo bonaerense estará sobre la mesa.
En los principales despachos bonaerenses se corrió la voz de que referentes massistas le mandaron un WhatsApp a Axel Kicillof para quejarse sobre la polémica en Roque Pérez y la respuesta del Gobernador fue: “No sabía nada, pero me ocupo”. Otro dato más, el viernes 31 de mayo -según pudo saber CRONOS-, Sciaini participó del acto que encabezó el mandatario bonaerense en Pirovano (Bolívar) y aprovechó para encararlo y mostrarle su disgusto. Kicillof puso paños fríos a la cuestión, le reiteró que no tenía nada que ver con la movida, pero que “tomaría determinaciones” para que la presidencia del Concejo vuelva a ser del intendente.
Sin embargo, en el massismo aún desconfían de Kicillof. Desde hace semanas, observan con cautela los movimientos de los intendentes y referentes kicillofistas (Jorge Ferraresi, Mario Secco, Fabián Cagliardi y Jorge Paredi, entre otros) que –adelantados- fogonean la candidatura presidencial de Axel para el 2027. “Están apurados, no es tiempo de discutir candidaturas”, resumió en palabras un armador massista de la Provincia. Por lo bajo, el Frente Renovador sabe que esa discusión se dará tarde o temprano, pero que la primera pulseada será el armado de las listas legislativas del 2025. Si bien, por ahora (siempre por ahora), el massismo solo lanzó advertencias, no es el primer descontento que tiene con el Gobernador.
Los hermanos De la Torre y secuelas del escándalo de los alimentos retenidos
Las internas no solo son costumbre de la “casta” o la política tradicional. Los ecos del escándalo de los alimentos retenidos que provocaron la rimbombante salida de Pablo De la Torre de la secretaría de Niñez y Familia, dependiente del Ministerio de Capital Humano, que dirige Sandra Pettovello tuvieron su eco en la Legislatura bonaerense.
Sucede que, el ahora libertario Pablo, es hermano del senador Joaquín De la Torre, hombre que supo tener la camiseta del kirchnerismo, massismo, vidalismo y, hasta la semana pasada, mileismo. El otrora intendente de San Miguel, molesto con la jugada que “expuso” a su consanguíneo mandó a decir que abandonaba el bloque “libertario” que integra junto a Carlos Curestis y Florencia Arietto. Además, dejó trascender que “ordenó” que su alfil, el diputado, Juan José “Turco” Esper, exfuncionario de San Miguel, abandonaba el bloque que conduce Nahuel Sotelo.
Sin embargo, CRONOS pudo saber que la Casa Rosada -en principio- quiere evitar más esquirlas contra Pettovello y activó contactos con los hermanos De la Torre para que no rompan los bloques bonaerenses. Desde su bunker en San Miguel, dejaron trascender que para bajar tensiones el Gobierno Nacional primero tiene que desactivar la denuncia contra Pablo. Hasta el cierre de esta nota, dato no menor, ni en Diputados, ni en el Senado se presentó el oficio para la conformación de un nuevo bloque.
Por Juan Alfaro (ALFA) | Director de Cronos Noticias