Pese al floreado inicio del gobierno nacional de Javier Milei en lo que parecía ser el principio de la caída de la casta de la mano del presidente y su equipo respaldado por el PRO, esa relación se rompe poco a poco con Mauricio Macri cada vez más relegado por el oficialismo debido a tensiones atravesadas desde Karina hasta Patricia Bullrich con el ex presidente.
Mauricio Macri comenzó a hacer correr los rumores que lo colocan en una importante candidatura en el Senado de la Nación por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En medio de tensiones con Karina Milei, por descontentos personales, la Secretaria General planea jugarle la Capital al ex presidente, con Jorge Macri en el medio.
Karina Milei sabe que Mauricio Macri se refiere a ella como “una tarotista que vendía tortas por Instagram, y la guerra entre el líder del PRO con la Secretaria de Gobierno es inminente. El problema para el partido amarillo aparecería dentro del gobierno, con Patricia Bullrich como actor fundamental y que jugaría para La Libertad Avanza

Patricia sería la apuntada por el gobierno nacional para protagonizar la lucha por la Ciudad, además de que en La Libertad Avanza tienen casi seguro de que la presidenta del PRO no tendría problema de enfrentarlos, ni siquiera a su principal figura como lo es Mauricio Macri.
Sin embargo, la estrategia de Karina y Bullrich recae directamente en el actual gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. En medio de tensiones con el Gobierno porteño, desde Nación buscarían bajar impuestos sin consultarle a Jorge Macri.
Los nombres de Karina y Patricia en la Ciudad trabajan en serruchar el mensaje de Jorge Macri acerca de la baja de impuestos en CABA. Pilar Ramírez y Juan Pablo Arenaza serían los protagonistas que representarían a las autoridades nacionales en el territorio porteño desde la Legislatura.

El objetivo está en afectar la recaudación de Jorge Macri en CABA, tal como lo trató desde su asunción la cartera económica del gobierno nacional con la quita de fondos al primo del ex presidente, lo que llevó al recorte de servicios de limpieza, iluminación y reparación de calles.
En ese aspecto, el plan Arenaza – Ramírez consta de modificarle al gobierno de Jorge Macri, por medio de la Legislatura porteña, la alícuota del 3% al 1% para autos usados nacionales y que no superen los 25 millones de pesos, mientras que para autos 0km no alcancen los 40 millones de pesos.