sábado 27 de abril de 2024 - Edición Nº2767
Cronos Noticias » Policiales » 18 mar 2024 06:00

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Raid criminal: moto y autos robados, asaltos callejeros y abuelos desesperados por la nieta desaparecida

Armados y en un par de horas, jóvenes violentos realizaron una tremenda gira delictiva en la noche del viernes. Durante la madrugada el grupo de víctimas se acumuló en la misma comisaría de la zona oeste del Conurbano bonaerense.


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En los últimos días el gobierno de la provincia de Buenos Aires anunció que iba a colaborar con su par de Santa Fe y por ello envió 80 móviles policiales que serán utilizados para reforzar los patrullajes en la ciudad de Rosario. También prometió consignar personal capacitado y especialista en la lucha contra el narcotráfico.

La decisión no cayó bien entre los bonaerenses que viven refugiados en sus domicilios y cambiaron el tiempo de ocio que dedicaban a ver cine en Netfix, por observar las imágenes captadas por sus cámaras de vigilancia. Con su disposición el gobernador aumentó los reclamos por la escasa presencia policial y, además, por las nulas tareas para prevenir delitos que se evidencian en el territorio por el que debe velar.

La noche del viernes la localidad de Villa Madero, en La Matanza, fue asolada por tres delincuentes que, según las víctimas, no debían superar los 20 años. Los malvivientes portaban al menos un arma de fuego y con ella sustrajeron 3 automóviles y una moto, asaltaron al conductor de un taxi y desistieron de robar otra motocicleta por la intervención de los vecinos. Fueron dos horas en las que los uniformes de la Bonaerense desaparecieron,

Ataque 1

Soledad y Mariela trabajan en el buffet del club "El Fortín de Tapiales" y en el comienzo del fin de semana les tocó hacer un trabajo poco habitual: entregar los pedidos en los domicilios de los clientes. Pasadas las 22, a bordo del Renault Clío color gris de Soledad, las mujeres llegaron hasta una vivienda ubicada en La Bajada al 700.

Cuando Mariela descendió con la vianda que les habían encargado, las eventuales delivery fueron sorprendidas por los malvivientes que aparecieron a la carrera desde las vías del Ferrocarril Belgrano sur. El primero subió al Clío por la puerta del acompañante, amenazó a Soledad y le dio una trompada en un ojo para que abandone el rodado. Al mismo tiempo un cómplice la apuntó con un arma de fuego y le exigió la entrega del teléfono celular.

A continuación el delincuente armado se abalanzó sobre Mariela, la encañonó y bolsiqueó para quitarle las pertenencias.

"Mi ojo esta bien, no fue nada grave, solo queda el susto y agradecer que puedo contarlo y que no paso a mayores", le comentó Soledad a CRONOS. "Yo no vi las armas, mi compañera sí. Nos sacaron los teléfonos y el dinero que habíamos recaudado con las entregas, también la mercadería que aún teníamos que repartir y estaba en el auto", detalló la joven que no recuperó el vehículo asegurado contra robos.

Los precoces malvivientes se alejaron a toda velocidad y a doce cuadras, sobre calle Benito Álvarez entre Dean Funes y Cochabamba, le intentaron robar la moto al "Colo". Los sujetos lo abordaron pero su accionar fue percibido por algunos vecinos que los obligaron a regresar al Clío y escapar en dirección a la Av. Crovara.

El revés enfureció a los jóvenes ladrones que en los siguientes asaltos ascendieron en la escala de violencia. Alrededor de las 23 y a pocas calles del anterior, en la intersección de Paso y O' Gorman, en Villa Insuperable, se toparon con Ricardo, un muchacho que trabaja como conductor de taxi y caminaba hacia su domicilio.

Los malandras lo rodearon, le pusieron un revólver en el pecho y le robaron todo.

"Lo encañonaron con el arma en el pecho y le sacaron el teléfono celular, las zapatillas y la mochila. En el bolso llevaba una campera y los papeles del taxi, está desesperado porque vive al día y ahora no podrá trabajar. Los papeles están a nombre del dueño del vehículo, Julián Arias, y la patente es NJY474. Ojalá aparezcan y que se pueda solucionar rápido", expresó Federico, un amigo de la víctima.

¿Dónde está la nena?

De manera llamativa, quizá porque sean de la zona y se sienten cómodos jugando el "partido" de local, los sujetos regresaron con el Clío a Villa Madero. Pocos minutos después de asaltar a Ricardo, interceptaron al matrimonio Acuña sobre la calle Olavarría, a 600 metros donde ocurrió el primer robo hacía menos de una hora.

La pareja y su pequeña nieta se desplazaban en un Chevrolet Prisma color negro que estacionaron a pocos metros de la vivienda. La escena fue observada por los ladrones que la rodearon y con gritos amenazantes la obligaron a entregar el automóvil.

En diálogo con CRONOS otra de las víctimas le comentó que la pareja aún estaba muy angustiada luego de recuperar el auto.

"En la comisaría los conocí cuando nos acercamos a realizar la denuncia. Aún estaban conmocionados por lo que les tocó vivir, durante unos segundos creyeron que los pibes se habían llevado el auto con la nieta en el interior. No la vieron cuando se bajó y se alejó a la carrera muerta de miedo. Ellos gritaron que no se la lleven y. cuando solicitaban ayuda, la nieta salió del lugar donde se había escondido", relató Mariana, la próxima víctima del raid delictivo.

En terreno conocido los ladrones aceleraron, se descontrolaron y se separaron: dos se quedaron y continuaron con los robos a bordo del Prisma, el tercer cómplice desapareció con el único automóvil que hasta el momento no pudo ser recuperado, el Clío de Soledad.

El reloj marcaba que varios minutos habían superado las 23 y Mariana estacionó el Ford Ka color gris plata sobre la calle Gral. Pico al 1000. La mujer había llegado hasta el lugar para visitar a un familiar y cuando descendió del vehículo el ruido de un automóvil con una cubierta trasera en llanta y una frenada inesperada, la hicieron girar la cabeza.

Los sujetos descendieron del golpeado Prisma, que quedó abandonado y en marcha en medio de la calzada, corrieron hacia la mujer y con furiosos gritos le exigieron que les entregue las llaves.

"Cuándo los vi venir y los escuché, deje las llaves en la puerta y corrí en dirección contraria también a los gritos pidiendo ayuda", le contó Mariana a este medio. "El que manejaba se subió rápido, al otro le costó un poco porque la puerta del pasajero tiene un problema con la cerradura y no es fácil de abrir. En ese momento agarré una piedra y se la tiré, no le pegué a él pibe, dio en la luneta a la que sólo le quedó una marca por el impacto", detalló la mujer.

"No me robaron nada importante, todas las pertenencias ya las había bajado y me las llevé cuando corrí. Los pibes se fueron con mi Ka modelo 99 por Gral. Pico en sentido a la Av. Gral. Paz. No se que le hicieron, el auto tiene ruidos que antes no se escuchaban", agregó la señora que es vecina de Villa Madero de toda la vida.  

Durante la demencial huida hacia la avenida de circunvalación, la pareja de criminales visualizó a un joven que transitaba en motocicleta y fue tras él. Lo persiguió a toda velocidad alrededor de un kilómetro y, según contó Francisco, se le acercaron de manera peligrosa y temeraria en todo el recorrido.

El brutal juego del gato y el ratón llegó a su fin cuando el motoquero temió que lo chocaran y que su vida estaba en altísimo riesgo. Se detuvo en el cruce de las calles Blanco Encalada y Constituyentes, donde los sujetos lo rodearon y le quitaron la mochila en la que llevaba diversas pertenencias. También el casco que no le podían sacar porque lo llevaba atado.

"La moto es una Zanella 400 cc pero no me importa, necesito recuperar los documentos y las tarjetas. Están a nombre de Francisco Quevedo", le indicó el muchacho a CRONOS.

Instantes después los ladrones escaparon en la moto que no podían arrancar y abandonaron el Ford Ka que en pocas horas regresó a Mariana, su legítima dueña. Los robos de estos rodados sucedieron a pocas cuadras del primer atraco.

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