Este jueves, los vicegobernadores de la Argentina emitieron un comunicado para referirse a lo que viene sucediendo en Rosario con respecto al narcotráfico. En ese marco, exigieron al gobierno nacional que tome “acciones coordinadas” para erradicar la situación que “tiene en vilo” al país.
“Vicegobernadores y Vicegobernadoras de las provincias argentinas alzamos la voz y apoyamos todas las acciones que sirvan para erradicar el flagelo del narcotráfico sin límites en nuestro país y que hoy en particular tiene en vilo al Gobierno y el pueblo de la provincia de Santa Fe”, iniciaron.
El comunicado está firmado por la Vicegobernadora de la provincia de Buenos Aires, Verónica Magario; Vicegobernador de Salta, Antonio Marocco; Vicegobernador de Río Negro, Pedro Pesatti; Vicegobernadora de Tierra del Fuego, Mónica Urquiza; Vicegobernador de Chubut, Gustavo Menna; Vicegobernadora de Entre Ríos, Alicia Aluani; Vicegobernador de Formosa, Eber Solis; Vicegobernadora de La Rioja, Teresita Madera; Vicegobernadora de Neuquén, Gloria Ruiz; Vicegobernador de Corrientes, Pedro Braillard Poccard; Vicegobernador de Catamarca, Rubén Dusso; Vicegobernador de Santa Cruz, Fabián Leguizamón; Vicegobernador de Santiago del Estero, Carlos Silva Neder; Vicegobernador de Tucumán, Miguel Ángel Acevedo; Vicegobernador de Misiones, Lucas Spinelli; Vicegobernador de Jujuy, Alberto Bernis; Vicegobernadora de La Pampa, Alicia Mayoral; Vicegobernadora de Córdoba.
Asimismo, mostraron su “convicción” para acompañar en lo necesario a la provincia de Santa Fe y repudiaron a las “mafias” que actúan con impunidad. “Brindaremos el apoyo institucional necesario para dejar atrás esta situación de emergencia”, argumentaron.
En esa línea, remarcaron que la lucha contra el narcotráfico requiere de “múltiples abordajes”, aunque aclararon que sus daños “no distinguen regiones y requieren de acciones coordinadas” desde todos los lugares del Estado.
No obstante, los vicegobernadores respaldaron la labor en conjunto entre el gobierno nacional y santafesino en buscar de “brindar recursos y operatividad a las fuerzas de seguridad” para profundizar la persecución a los que infunden terror en la sociedad argentina.
“Este no es un problema de una provincia en particular, nos afecta a todos”, concluyeron.