Durante el Debate Presidencial, resultó llamativo que ningún integrante del PRO acompañase a Javier Milei durante su presentación. A pesar del pacto con Mauricio Macri y Patricia Bullrich, el economista libertario siente un enojo con ellos por las promesas incumplidas en las últimas semanas.
La advertencia de la Justicia Electoral bonaerense generó disconformidad en el sector de Milei, ya que está convencido que Guillermo Ferraro, el CEO a cargo de la fiscalización, se distrajo en el control de esos fondos. Esta bronca se suma a la falta de fiscales en las principales regiones del país.
De acuerdo a lo trascendido en los medios, el libertario ordenó retirar la invitación para el debate de este domingo a todos los invitados del PRO. Incluso, debió convocar hasta concejales del Conurbano para llenar las butacas vacías del auditorio.
El pacto Macri-Milei señalaba que la logística de las boletas y la fiscalización nacional de la elección quedarían a cargo del ex Presidente, cuando Milei pactó su alianza con él. Según informó CRONOS hace algunas semanas, el creador de Cambiemos le habría prometido también aportar 15 millones de dólares y su supuesta estructura nacional de fiscalización para enfrentar el balotaje.
Un dirigente cercano a Macri destacó que no está controlando la campaña del economista libertario, y solamente simula que es el jefe. Si bien la fiscalización quedaría a cargo de Guillermo Dietrich, este le afirmó a sus íntimos que no quiere saber nada con la política y no quiere reconocérselo al ex Presidente para no desilusionarlo.
Por tanto, este panorama complejo cae sobre Karina Milei, que es la jefa de campaña del candidato presidencial y una de las pocas personas de su confianza.
De igual manera, la fiscalización continúa formalmente a cargo de Ferraro, hombre cercano a Macri. Sin embargo, los dirigentes de La Libertad Avanza no se muestran contentos con su participación, ya que no cuenta con vasta experiencia en la organización de una fiscalización nacional.