El gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se encuentra en un estado de algarabía total. La victoria de Jorge Macri en las PASO porteña, que significó un duro traspié para Horacio Rodríguez Larreta, podría generar cambios urgentes en el armado de la Capital Federal. En el jorgemacrismo quieren arrancar la transición en los próximos días y comenzar a controlar la botonera de la Jefatura de Gobierno.
Los triunfos de Patricia Bullrich, de Jorge y de Néstor Grindetti dejaron al jefe de Gobierno en manos de los “halcones” de Juntos por el Cambio. Su margen de maniobra es muy pequeño, incluso en la Ciudad, donde también perdió frente a Patricia. En ese sentido, un armador de la ex Ministra afirmó que los ministros tendrían que haber renunciado el lunes luego de que Larreta haya perdido en su propio distrito.

La Ciudad tiene tres niveles: una es la estructura del gobierno propiamente dicha, otra es la que contiene a los aliados porteños y una tercera que cumple la misma función, pero con los aliados nacionales. Con la derrota categórica del larretismo, dos de las tres estructuras no tienen demasiada razón de ser. Por este motivo, cerca de Jorge Macri quieren comenzar rápidamente con la transición y desembarcar en los ministerios de mayor envergadura.
Un funcionario porteño vaticinó que las carteras de Espacio Público, Salud y Desarrollo Humano serán eliminadas con el arribo del ex intendente de Vicente López. Además, expresó que el Banco Ciudad también está en la mira, al igual que las secretarías de coordinación y administración.
Asimismo, la intención del larretismo es mantenerse como un bloque y negociar unidos para tener más fuerza en la toma de decisiones. No obstante, desde la sede de Parque Patricios se preguntan cómo harán ordenar a las segundas líneas que están alarmados por su futuro político ante un cambio de gobierno y quieren alinearse al bando ganador.

En ese sentido, un ex funcionario porteño destacó que Larreta debe negociar con Jorge Macri, aunque resaltó que no será tan sencillo hacerlo con Mauricio Macri. Ante ese panorama, el actual jefe de Gobierno es consciente que perderá algunos funcionarios, en caso de que el ex Presidente tome cartas en el asunto.