En el partido de Moreno, donde la intendencia hace poco para combatir la inseguridad, las balaceras inquietan pero no sorprenden y los vecinos solo esperan que el próximo herido, o asesinado, no sea un familiar o un conocido.
En la noche del domingo, alrededor de las 23, las balas zumbaron por causas que aún se intentan determinar. Las hipótesis son tres: el histórico encono entre vecinos de los barrios Moreno 2000 y Villa Anita, o por una chica. También por ambas causas combinadas.
Lo cierto es que el domingo se produjo una sangrienta balacera sobre la calle Güemes, arteria que separa las barriadas enfrentadas, donde dos motociclistas de Moreno 2000, se cruzaron con un Chevrolet corsa y otros jóvenes en moto, oriundos de Villa Anita.
Al detectar la presencia de los rivales, Lucas Benitez, de 23 años, y el conductor de la moto, escaparon a toda velocidad con los dos otros dos vehículos acechándolos.
Luego de recorrer pocas cuadras, los perseguidores iniciaron la cruenta balacera que acabó en la intersección de las calles Güemes y Reservistas Argentinos, donde Benitez recibió un impacto en la espalda y cayó del rodado.
Varios minutos después y luego que los atacantes escaparon raudamente, se presentó en el lugar personal de la Comisaría 1ra. de Moreno que encontró a la víctima consciente y fue él quien identificó a sus perseguidores, con los que tendría disputas de vieja data.
Benítez fue trasladado al Hospital Mariano y Luciano de La Vega, donde lo intervinieron de urgencia pero, a pesar del esfuerzo de los médicos intervinientes, el muchacho falleció.
La causa es investigada por la Dra. Alejandra Pique, a cargo de la UFI Nro. 6 de Responsabilidad Juvenil, luego que las diferentes pesquisas señalaron a un adolescente de 17 años como responsable del homicidio.
Con el aval del Juzgado de Garantías del Joven y el de Garantías Nro. 3, la fiscal Pique ordenó la detención de un hombre mayor de edad, quien sería el conductor del Chevrolet Corsa.
El sujeto, arrestado por uniformados de la seccional 1ra. de Moreno, esta sospechado de haber provisto las armas utilizadas en el ataque. Mientras los investigadores buscan al asesino y los cómplices que están identificados, en los barrios Villa Anita y Moreno 2000, temen venganzas y una imparable escalada de violencia.