El precio de la vida es lo único que está en baja: lo mataron por un teléfono celular

Juan Francisco Fernández Acosta, un ciudadano venezolano de 27 años, perdió la vida la madrugada de este lunes, luego que en las primeras horas del sábado, alrededor de las 2:15, se habría resistido al robo de sus pertenencias y recibió el disparo mortal.

El lamentable suceso ocurrió en el barrio de Palermo, sobre la calle Araoz al 1450, entre Gorriti y Honduras, cuando el joven se encontraba con un vecino conversando en la vereda. Los amigos estaban sentados en la entrada de una bicicletería y un sujeto que portaba un arma de fuego los encaró y amenazó para que entreguen los objetos de valor.

“Dame el celular ¿o querés morir?, le habría dicho a la víctima que se resistió y forcejeó hasta que un proyectil le atravesó la cabeza.

Mientras el delincuente se escapaba del lugar, a la vuelta de la Comisaría Vecinal 25 y a cinco cuadras de la visitada Plaza Serrano, Juan Francisco fue asistido por su compañero, que resultó ileso y fue identificado como Tomás, hasta que llegó una ambulancia del SAME que lo trasladó al Hospital Dr. Juan A. Fernández, en la calle Cerviño al 3300.

El muchacho ingresó en estado desesperante a terapia intensiva, donde lo conectaron a un respirador artificial, y pocas horas después falleció.

La investigación del nuevo homicidio quedó en manos del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 45 e interviene el Dr. Marcelo Retes, a cargo de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 24.

El personal de la Comisaría Vecinal 14 A de la Policía de la Ciudad ya tiene las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad de la zona, las que están siendo analizadas para identificar al asesino que se encuentra prófugo, además de sus movimientos previos y posteriores al ataque.  

Según vecinos de Fernández Acosta, el muchacho llegó hace cuatro años y no tenía familiares en el país. Trabajaba como ingeniero de sistemas y hacía "changas" como delivery. Una tía del joven que vive en la capital de Venezuela, fue contactada y anoticiada del lamentable hecho. La mujer, ante la imposibilidad de viajar a Argentina, les habría pedido que les hagan llegar las cenizas del sobrino.