¡Nadie se atreva, a tocar a mi vieja! Preso habría ordenado el asesinato de quien robó a la madre

El miércoles 15 de febrero un llamado al 911 alertó sobre la aparición de un cadáver en un descampado ubicado en la intersección de las calles Herminio Constanzo y Doña Mayor Humanes de Molina, en el barrio 9 de Abril, del partido de Esteban Echeverría.

Como informó Cronos en aquel momento, David Amilcar García, un joven de 26 años, que había recuperado la libertad pocas semanas antes, fue hallado maniatado y con un impacto de bala en la cabeza. El sujeto era conocido en la zona por su adicción a las drogas, a las que accedía con dinero obtenido por diferentes robos y hurtos.

Desde el inicio de la investigación que llevaron adelante el Dr. Gerardo Semisa, de la UFI Nro. 4 de Esteban Echeverría, y la DDI de Lomas de Zamora, se sospechó de una banda integrada por varios hermanos a cuya madre, García, habría asaltado pocos días antes en su vivienda del Barrio Federal, en Monte Grande.

Con este dato, los investigadores reconstruyeron los últimos pasos de la víctima con ayuda de testigos y las imágenes captadas por cámaras de vigilancia. Así se pudo obtener una grabación en la que se visualiza como García fue abordado por un sujeto que, mediante amenazas, lo obligó a subir a un Peugeot 207.

A partir de este avance y de identificar al propietario del mencionado rodado, los investigadores establecieron la relación del presunto instigador del homicidio y de su perpetrador.

Para la Justicia, un hombre identificado con las iniciales K.S., que se encuentra detenido en la Unidad Penitenciaria Nro. 37, en la localidad de Bárker, en el partido de Benito Juárez, fue quien encargó el crimen a su presunto cómplice identificado como L.R.

Según los encargados de llevar adelante las pesquisas, el homicidio está esclarecido y el móvil del crimen fue la venganza. K.S. habría buscado revancha por el robo que sufrió su madre, a manos de García, pocos días antes en el Barrio Federal.

A partir de los indicios recabados y con el aval de la Justicia de Garantías, el fiscal de la causa ordenó sendos allanamientos en domicilios de la zona. Uno de ellos se realizó en una vivienda ubicada en la calle García Fernández al 2500, donde efectivos de la DDI de Lomas de Zamora secuestraron dos teléfonos celulares.

El segundo se llevó a cabo en una casa de Rafael de Sanzio al 5900, donde los investigadores hallaron el Peugeot 207 y otro teléfono celular.

El Dr. Semisa ordenó que se notifique a K.S. sobre la apertura de una causa en la que está imputado por el delito de "homicidio premeditado agravado por su comisión con arma de fuego y con el concurso de dos o más personas".

Además, dispuso una serie de dirigencias para ubicar el paradero de L.R, que hasta el momento se mantiene prófugo. El vehículo y los teléfonos celulares serán peritados por pedido de la fiscalía, en busca de rastros genéticos y el historial de las comunicaciones.