¿Y el alcohol cero? Borracha atropelló y mató a un hombre que iba a trabajar

Miguel Quiñonez trabajaba en un campo de golf y estaba de vacaciones, pero el sábado 7 de enero, el día que cumplía 50 años y su esposa 51, salió a hacer una “changa” para pagar los festejos que en la noche iba a tener con la familia.

Eran las 7 am, la hora exacta en la que Quiñonez había nacido 5 décadas antes, cuando salió de su casa y transitaba por la calle Ramos Mejía con su moto. Al llegar a la esquina de Avenida Lacarra dobló hacia la derecha y un instante después todo se terminó.

Denise Palacios conducía su Fiat Mobi a toda velocidad por Lacarra y embistió desde atrás, de manera brutal y criminal, la moto de Quiñonez que voló superando la altura del auto y se detuvo varios metros adelante cuando su cuerpo ya sin vida chocó contra un poste.

Palacios también se detuvo al impactar su vehículo contra otros tres palos de las luminarias públicas, pero la mujer no sufrió más que algunos golpes. Testigos que la vieron descender del auto afirmaron que no se podía mantener en pie por el estado de embriaguez que presentaba.

El test de alcoholemia que le realizaron, algunas horas después de haber asesinado a Miguel Quiñonez, dio resultado positivo con un valor de 1,64 g/l de alcohol en sangre. Un nivel muy superior a 0 con el que se debe manejar cualquier rodado. La familia de la víctima aguardaba el resultado del narco test, estaban convencidos que también estaba drogada.  

La causa que se tramita en la Unidad Funcional de Investigación (UFI) Nro. 3, a cargo de la Dra. María Lorena González, fue caratulada como homicidio culposo.  

Denise Palacios, quien manejaba totalmente borracha, recuperó la libertad a las 24 horas, cuando su víctima aún no había sido enterrada. La familia de Quiñonez le reclama a la fiscalía el cambio de caratula, a dolo eventual, para que la mujer pueda cumplir una condena en prisión.