Apuntalar la reactivación en medio de la incertidumbre

A partir de un análisis de extrema franqueza, el gobernador Axel Kicillof le pidió a sus principales colaboradores empujar la gestión, apuntalar la actividad en cada uno de los municipios y a sostener la reactivación.

Los encargados de  coordinar estas agendas de trabajo conjunto con los intendentes son el jefe de Gabinete, Martín Insaurralde, y la ministra de Gobierno, Cristina Álvarez Rodríguez.

Días atrás, desde la Casa Rosada se garantizó la decisión de realizar “21 grandes obras estratégicas” en la Provincia, con una inversión cercana a los $ 171 mil millones.   

Se sabe, la Provincia está condicionada a la llegada de fondos nacionales y cualquier potencial ajuste de esos recursos enciende una “alerta temprana” de preocupación ante el malhumor social, básicamente, en el Gran Buenos Aires.

“Nosotros no  podemos dejar obras sin terminar en la Provincia, como hizo María Eugenia Vidal cuando las paralizó durante el gobierno macrista”, se escuchó en la residencia gubernamental de calle 6.

Dicen en las diagonales que, por esa razón, no pocos intendentes oficialistas recibieron el pedido gubernamental para que procuren mantener la paz social en el Conurbano a la espera una “primavera política-económica” como antesala del Mundial de fútbol Qatar 2022. 

Distintos referentes del oficialismo bonaerense vienen intentando desenmascarar “maniobras inflacionarias y desestabilizadoras” que supuestamente se amparan en las “contradicciones" del Gobierno nacional en un claro intento por diferenciar la gestión Kicillof del presidente Alberto Fernández. 

Fue la funcionaria alineada a La Cámpora y titular del Instituto Cultural de la PBA, Florencia Saintout, la encargada de exponer, otra vez, el internismo feroz dentro del Frente de Todos al acusar a la Casa Rosada de “titubear” frente a un cóctel de decisiones económicas. 

También, la exdecana de la facultad de periodismo platense denunció la existencia de “maniobras desestabilizadoras que disfrutarían de un horizonte golpista”, y que son realizadas por “un sector de la oposición que no es solamente político, sino también económico, mediático, judicial y que detesta a la democracia y a los gobiernos cuando tienen una extracción popular”.

Después hasta la jefa de bloque de los senadores bonaerenses del Frente de Todos, María Teresa García, leyó un trasfondo político detrás del coyuntural clima de “turbulencia financiera” ante “un momento de debilidad política” del Gobierno nacional que propicia la aparición de “caranchos opositores” (y del exmilitar carapintada Aldo Rico, entre otros) en medio de los aumentos de precios al consumidor.

En ese contexto, la actual legisladora peronista y exministra de Kicillof criticó a sectores empresarios y parte de la oposición política por “generar zozobra e inestabilidad” cuando la situación económica y social es muy complicada.

“Antes de denunciar livianamente maniobras de extorsión y golpismo, deberían recordar que la acción sistemática de desestabilización nacen dentro del propio gobierno”, respondieron diputados desde la góndola opositora. 

Poco más o menos como hoja de ruta semanal, diputados y senadores de Juntos por el Cambio hacen fila para pegarle al Gobierno nacional y por elevación al de la Provincia.  

Legisladores bonaerenses del principal espacio electoral de JxC anticipan el fracaso del “dólar agro” y tildaron de “improvisada” la medida del Banco Central para estimular la venta de granos. 

Sin medias tintas y a diferencia de la Casa Rosada, no pocas entidades y productores del ámbito rural reconocen que con la Provincia el vínculo es fluido (al menos en la recepción de los pedidos) con Kicillof y su ministro de Desarrollo Agrario, Javier Rodríguez y su par de Producción, Augusto Costa.

Hace largo rato, la Gobernación busca construir puentes de acercamiento trazando una agenda de trabajo común con el sector agropecuario. 

No es menos real, también, que las reuniones de referentes de las entidades patronales que integran la Mesa de Enlace con legisladores opositores dentro de Juntos por el Cambio son periódicas dentro de la Legislatura de calle 53.  

"El Gobierno debería apoyar a los productores agropecuarios en vez de fomentar marchas del odio que lo único que generan son más divisiones en la sociedad”, coincidieron de forma unánime casi una docena de senadores y diputados de Juntos tras recorrer la Exposición Rural 2022 donde dialogaron con productores y representantes del sector agroindustrial antes de la marcha convocada por sectores afines al oficialismo K.    

Además, manifestaron que “el principal problema de este Gobierno es que el poder no está en la Casa Rosada, (en obvia alusión a la vicepresidenta Cristina  Fernández de Kirchner) lo que además se ve agravado porque el oficialismo en vez de escuchar decide todo el tiempo confrontar”. 

De la comitiva que recorrió la Rural del barrio porteño de Palermo además del jefe macrista del bloque de senadores, Christian Gribaudo y el titular de la bancada de diputados, el radical Maxi Abad; participó el legislador “lilito” bahiense Andrés De Leo.

Por Ricardo Salas

Fuente: lanueva.com