Eterna espera de justicia: se suicidó una víctima de violación en manada

En las últimas horas, fue encontrada sin vida Paula Martínez en su casa de Florencio Varela. La joven de 23 años había denunciado hace cinco años haber sido violada por, mínimamente, siete hombres, lo que le valió silencio e impunidad de la Policía, y las amenazas constante de los acusados. En marzo de 2022 está programado el juicio contra 10 imputados.

Según lo que pudo saber el sitio El Radar del Sur, el tío de la víctima la encontró ya sin vida en su domicilio de la localidad del Conurbano bonaerense. La principal y única hipótesis que se maneja por el momento es el suicidio.

La mujer ya había tenido intentos de quitarse la vida después de los hechos, que no terminaron con el desenlace fatal. Incluso, estuvo internada un tiempo en un hospital psiquiátrico.

La historia que se repite: un pedido de Justicia que llega tarde

Paula asistió en diciembre de 2016 a una fiesta de cumpleaños de una vecina, amiga de la infancia. Según el relato de la víctima, allí, el primo de la cumpleañera le ofreció un vaso que contenía algún tipo de droga en su interior, y cuando empezó a perder la consciencia, la subió a una camioneta y la llevó a otro domicilio.

En ese lugar, denunció que fue violada en manada. Dijo que por las siluetas supo que eran más de cinco personas, pero por el estado de la droga, solo pudo identificar con rostro a esa cantidad.

Menos de 72 horas después, se presentó en la comisaría para realizar la denuncia, donde indicaría que sufrió una doble revictimización: dejaron asentada que estaba en estado de alcoholismo, aunque ella dijo que había sido drogada; fue maltratada y examinada por un médico hombre, a pesar de su pedido que no sea alguien de sexo masculino.

Lo peor de todo fue lo que pasó después. Luego, los cinco acusados aparecieron en la comisaría cuando todavía estaba ella, por lo que alguien de ahí les había avisado. Desde ese momento, sufrió un acoso constante, y denunció más de 30 veces a los acusados por amenazas, sin obtener respuesta.

Hace cuatro años se empezó a acercar a los medios, y en aquella oportunidad, expresó: “Desde ese momento, ellos están libres y se siguen manejando con total impunidad en el barrio, mientras yo estoy hace un año con siete criaturas ahí adentro, porque tengo tres hijos y cuatro hermanos menores, corriendo peligro de vida. Y ellos no pueden ir ni siquiera al jardín”.

Durante la pandemia, Paula dio un móvil desde su casa para Telefé. En vivo, sus vecinos (y acusados de la causa) la increparon frente a las cámaras: “Esto es lo que sufro siempre, constantemente. Es inhumano vivir así. No entiendo cómo la Justicia sigue sin hacer nada".