Furor por las monedas de un peso con error: piden hasta 50.000 pesos

Por un error de impresión en monedas de un peso argentino, la serie se convirtió en una de las grandes demandas de los sitios de subastas y ventas online. Algunos usuarios piden entre 15.000 y 50.000 pesos por cada una, es decir, entre 83 dólares y 277 dólares al tipo de cambio informal.

En julio de este año, un video se volvió viral luego de que un hombre mostrara que hizo fundir 4.000 pesos en monedas y por el valor del metal le pagaron el doble, 8.000 pesos. Ahora, otro rebusque para hacerle frente a la acuciante inflación se difundió en las redes sociales.

En sitios como Mercado Libre, una serie de publicaciones llamó la atención por el precio de venta de algunos lotes de monedas de un peso argentino defectuosas. En algunos casos, el valor de los lotes es de 10.000, 15.000 y hasta 50.000 pesos. Se trata de aquellas que contienen la inscripción “Provingias del Río de la Plata”, en lugar de “Provincias del Río de la Plata”.

A raíz de distintas publicaciones, muchos usuarios quisieron aprovechar la supuesta “fiebre” por las monedas defectuosas. Esto hizo no solo que surjan nuevas publicaciones en los sitios de venta y subastas online, sino que también no faltó quien ironice con el precio que piden por ellas.

“Tengo 17 de esas, ¿vos comprás?”, preguntó un interesado en una publicación. “No, las vendo porque tengo como 50 de esas″, respondieron. 

Otro usuario preguntó si el valor de las monedas respondía a que fueron acuñadas en oro en lugar de otro metal, mientras que alguien recurrió a la frase que se popularizó con el reality show y luego devino en meme: “No lo sé, Rick…”.

La historia de las monedas defectuosas se remite al año 1995, cuando el gobierno de Carlos Saúl Menem con Domingo Cavallo y Roque Fernández -ministro de Economía y presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA) respectivamente- le encargó a Inglaterra la confección de 70 millones de monedas de un peso en pleno plan de convertibilidad. 

Cuando se detectó el error, ya habían sido acuñadas 56 millones de esas monedas que contenían una ‘G’ en vez de una ‘C’ en la palabra “provincias”. En el caso de los 14 millones restantes, el error fue subsanado y se elaboraron de manera correcta.