Desde la oposición le piden a Provincia mayor control en los precios de insumos médicos

A través de una declaración parlamentaria, el senador de Juntos por el Cambio, Andrés De Leo, expresó su preocupación ante el incremento en el precio de los medicamentos esenciales para el tratamiento de pacientes que se encuentran en terapia intensiva por parte de los laboratorios. Asimismo, instó a las autoridades provinciales y nacionales para que les exijan que retrotraigan los valores anteriores al aumento.

“El exponencial aumento de contagios producto de la segunda ola de Covid, el agotamiento del personal médico y un sistema sanitario funcionando al límite de su capacidad, traen aparejado como daño colateral el aumento descomunal e injustificado que tuvieron los medicamentos esenciales para el tratamiento de pacientes que se encuentran en terapia intensiva”, argumentó el legislador bahiense.

A raíz de la pandemia, se generó un aumento inusual de la demanda de analgésicos, sedantes y relajantes musculares que se utilizan con aquellas personas que se encuentran transitando distintas patologías en camas de la Unidad de Terapia Intensiva (UTI). Los dos grandes proveedores mundiales de estos medicamentos son China e India por lo que, debido a las dificultades de movilidad por los aislamientos, hubo dificultades de provisión y escasez en muchos países, así como distorsiones en los precios y el surgimiento de un mercado negro.

En este sentido, la Unión Argentina de Salud (UAS), que nuclea al 70% de las empresas dueñas de prepagas con treinta millones de afiliados, informó: “Este grupo de medicamentos esenciales para la vida de los pacientes graves ha tenido incrementos desmedidos en el último año y, de algún modo, la firma del acuerdo entre la Secretaría de Comercio Interior, el Ministerio de Salud de la Nación y representantes de la industria farmacéutica los convalida”. Además, advirtió a diversos medios de comunicación que el convenio convalida aumentos de hasta el 1.300%.

Por su parte, la entidad que reúne a las prepagas manifestó a través de un comunicado: “La industria farmacéutica ha fijado precios en forma unilateral, sin ningún control regulatorio hasta ahora, basándose en especulaciones, escudados en la devaluación del peso argentino, las dificultades para la importación y la escasez de materia prima a nivel mundial”. Incluso con estos aumentos los prestadores y financiadores continúan teniendo problemas de aprovisionamiento.

“Ante el estado de situación descripto, entendemos que resulta imprescindible la intervención de las autoridades provinciales y nacionales, con el fin de que los laboratorios retrotraigan los aumentos injustificados, los cuales oscilarían entre un 300 y 1300 por ciento”, concluyó Andrés de Leo.