V.I.D.A: el nombre de la vacuna rusa que será producida en Argentina

La vacuna rusa que se fabricará en Argentina y que elaborará el laboratorio Richmond en su planta en Pilar, según el acuerdo con el Instituto Científico Gamaleya de Rusia se llamará V.I.D.A.

La fabricación de las vacunas rusas será en la fábrica de la empresa que preside Marcelo Figueiras ampliará en el norte del Conurbano, tras el exitoso lanzamiento del fideicomiso financiero por 70 millones de dólares, destinado a financiar el proyecto.

La compañía firmó a fines de febrero pasado un acuerdo preliminar con el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) para construir una planta y ser la pata local en la fabricación de los componentes. Desde Moscú informaron que Argentina sería el primer país autorizado para la producción de las dosis de la Sputnik V.

En este sentido, Argentina fue el primer país latinoamericano en registrar Sputnik V en su territorio. El registro fue a través de una autorización de uso de emergencia (emergency use authorization), y la vacunación empezó en Argentina el 29 de diciembre de 2020. La vacuna producida en Argentina podrá luego se exportada a otros países de América Central y América Latina.

Con la transferencia de tecnología facilitada por el Fondo Ruso de Inversión Directa, Laboratorios Richmond será la primera empresa farmacéutica nacional productora de la vacuna Sputnik V en Latinoamérica.

Luego los primeros lotes de vacunas serán enviados a l Instituto Gamaleya para las pruebas de calificación de calidad.

¿Cómo son los dos componentes de la vacuna?

Sputnik V no tiene ningún elemento del coronavirus en su composición, se presenta en forma liofilizada, es decir, como un polvo que se mezcla con un excipiente para disolverlo y luego administrarlo por vía intramuscular.

La vacuna usa una tecnología de adenovirus humano de dos vectores diferentes, Ad5 y Ad26, para una primera y una segunda inyección. Sin embargo, Sputnik V no contiene adenovirus humanos vivos, sino vectores adenovirales humanos que no son capaces de multiplicarse y son completamente seguros para la salud.

Los “vectores” son vehículos que pueden introducir material genético de otro virus en una célula. El gen del adenovirus, que es el causante de la infección, se sustrae y en su lugar se inserta un gen con el código de la proteína de otro virus. El elemento insertado es seguro para el organismo y ayuda al sistema inmunológico a reaccionar y producir anticuerpos que nos protegen de la infección.

Por su parte, la ministra de Salud de la nación, Carla Vizzotti anunció hoy en conferencia de prensa: “Esta situación es una gran noticia. Tenemos que ser prudentes. Tenemos que esperar el resultado del control de calidad y en función de eso ver los tiempos. Tenemos en claro la complejidad que tiene el proceso de producción".

En caso de avanzar con lo previsto en este acuerdo entre privados, se calcula que la fábrica argentina pueda producir cerca de 1 millón de vacunas en junio próximo y la posibilidad de escalar la producción hacia fines de diciembre.