La casa equivocada: un ladrón se escondió en un hogar donde vivían policías y murió baleado

Sucedió el día de ayer por la madrugada, cuando uniformados que recorrían la localidad de Villa Centenario vieron que varios delincuentes a bordo de un Ford Fiesta gris robaban motos a mano armada a transeúntes y otros automovilistas.

De este modo, móviles del Comando Patrulla de la Policía local y las comisarías 7ma. y 10ma. de Lomas de Zamora iniciaron un operativo cerrojo en la zona.

Durante el operativo, los policías vieron un auto de características similares en la esquina de Itatí y Saladillo. Al intentar interceptarlo, el conductor aceleró y escapó junto a sus acompañantes.

Los ladrones escaparon hacia Ingeniero Budge, según indicaron fuentes policiales, y empezaron a dispararle a la policía, en medio de un día normal lleno de peatones.

Al poder cercar a los delincuentes, estos quisieron escapar en el auto, hicieron una mala maniobra y cayeron a un zajón en la esquina de Ginebra y Ricardo Palma.

Según expresaron voceros, cuatro ladrones bajaron del auto, dispararon nuevamente a los policías y escaparon en distintas direcciones. Pero dos de ellos, identificados como Gabriel Araujo Franco (26) y Rodrigo Hernán Amarilla (20) fueron capturados de inmediato.

Otro de los delincuentes ingresó a una casa en donde residían tres oficiales de la Policía de la Ciudad, se tiroteó y resultó herido en el tórax y el hombro. Al salir a la calle, finalmente falleció

Fue identificado como Ismael Morales (28), quien tenía antecedentes penales. Se le secuestró una pistola calibre 9 milímetros con la numeración suprimida.

Respecto al auto que manejaban, un Ford Fiesta, se constató que tenía pedido de secuestro del mes pesado por un robo calificado ocurrido en el partido de La Matanza.

Interviene en la causa la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 8 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, que dispuso que se detuviera a los dos sospechosos por los delitos de atentado y resistencia a la autoridad, abuso de arma, tenencia ilegal de arma de guerra y encubrimiento agravado.

Por otro lado, se ordenó el secuestro de las armas reglamentarias de los policías que intervinieron tanto en el operativo como los residentes de la vivienda.