El presidente Alberto Fernández recibió esta tarde en la Residencia de Olivos al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof; y al vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, para realizar un seguimiento de la situación de la pandemia de coronavirus COVID-19 en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
El jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta no estuvo presente, por recomendaciones médicas, tras el positivo de Coronavirus de María Eugenia Vidal y por el cual Larreta –quien mantuvo un encuentro hace días con la ex gobernadora- tuvo que realizarse el test, que finalmente dio negativo.
El escenario está sumergido en los datos de crecimiento de los casos en los últimos días en el AMBA. Desde la Provincia de Buenos Aires, Kicillof y distintos funcionarios advirtieron públicamente la situación y avisan que a este ritmo el sistema sanitario puede colapsar a en 30 0 40 días. En los trazados, está la posibilidad de retroceder de Fase de la cuarentena para el AMBA.
Desde la Ciudad de Buenos Aires, por el contrario se muestran reacios a retroceder de Fase y no reciben bien las críticas al permiso para salir a correr que se les dio a los porteños.
Según pudo reconstruir CRONOS, Kicillof fue con la idea clara: trasladar la preocupación de la Provincia “que es muy grande”.
“Tenemos que reducir la circulación”, fue una de puntos que el gobernador bonaerense insistió.
“Si se siguen duplicando los casos a este ritmo podemos tener un mayor problema”, dijo, idea que adelanto públicamente y en una cumbre por videoconferencia con intendentes bonaerenses ayer.