La multinacional argentina Techint suspendió a 500 trabajadores de Zárate que realizaban obras en el reactor Carem 25 y denunció que la decisión se basa en millonarios atrasos de los pagos del gobierno nacional a la empresa.
Desde la Uocra, gremio al que pertenecen la mayoría de los empleados suspendidos, afirmaron que la decisión es “ilegal” y reclamaron la intervención de los organismos competentes para destrabar el conflicto.
Según detallaron, los obreros no fueron formalmente notificados y solo se enteraron de la medida cuando arribaron a su lugar de trabajo.
Techint reclama pagos atrasados y una readecuación de precios a la Comisión Nacional de Energía Atómica (CONEA), el ente que contrató a la empresa para las obras que se iniciaron durante el gobierno anterior y por diversos conflictos sucedidos en el mandato de Cambiemos, su finalización pasó de estar prevista para 2020 a estirar los plazos hasta 2022.
En agosto de este año se había producido un conflicto similar que afectó a unos 130 trabajadores y los motivos habían sido los mismos.
La Central Argentina de Elementos Modulares (Carem) es un reactor de generación de energía nuclear pequeño, con menos costo y tiempos de producción que las CANDU (Canadian Deuterium Uranium, por sus siglas en inglés) como las de Atucha I, II y Embalse y las de uranio enriquecido.
En 2018, Julián Gadano, subsecretario de Energía Nuclear, había dicho que el CAREM es "la gran apuesta estratégico tecnológica de Cambiemos", y un año después la obra está paralizada.
La empresa sostiene que no logró llegar a un acuerdo con la Comisión Nacional de Energía Atómica por la refinanciación de la construcción tras la suba del dólar, a la que se sumó la devaluación post electoral.