Un sargento de la Bonaerense fue asesinado por un sujeto que se habría intentado suicidar

Germán Farías, un sargento de la Policía bonaerense, perdió la vida a manos de un hombre que le arrebató el arma reglamentaria y que debía estar internado en un neuropsiquiátrico. Maximiliano Lezcano, también sargento del Comando de Patrullas, resultó herido con múltiples impacto de bala y permanece internado.

El agresor, identificado como Gabriel Cañete, de 34 años, también resultó herido y fue detenido poco después. Los efectivos que realizaron el arresto le incautaron el arma que le sustrajo al oficial Farías.  

El caso

Alrededor de las 12:30 un llamado al número para emergencias policiales 911, alertó sobre un hombre que se comportaba de forma agresiva en la vía pública y que momentos antes, en el cruce de la RP 202 y Balcarce, había saltado delante un automóvil y el conductor lo esquivó.

Los oficiales Farías y Lezcano respondieron a la urgencia y en cercanías del Polideportivo Nro. 2 de San Fernando, frente al Aeropuerto Internacional, hicieron contacto con el señalado y entablaron un diálogo para tranquilizarlo.

Sargento Germán Farías

Mientras aguardaban la llegada de una ambulancia, los uniformados sentaron a Cañete en la acera y fue en ese momento que, de forma inesperada y tras un breve forcejeo, el sujeto se apoderó de la pistola y abrió fuego.

El resultado de la balacera fue al menos un impacto en el cuerpo del sargento Farías que, pocos minutos después, fue trasladado al Hospital San Cayetano donde finalmente perdió la vida. El jueves era el último dia de servicio del joven policía que el viernes comenzaba las vacaciones. 

Al oficial Lezcano le disparó en 9 ocasiones pero las balas no alcanzaron órganos vitales y permanece internado en el Hospital Petrona de Cordero.

Gabriel Cañete escapó del lugar y pocos minutos después fue interceptado por un móvil del Comando de Patrullas de San Fernando que participaba de su búsqueda. En poder del sujeto que presentaba heridas de bala en un glúteo, un pie, una mano y una clavícula, los uniformados encontraron el arma del oficial caído. El sujeto fue trasladado al Hospital de Cordero donde permanece internado y fuera de peligro.

Sargento Maximiliano Lezcano

Salud mental

En las últimas horas se conoció una versión que hasta el momento no pudo ser confirmada, que indica que la familia de Cañete solicitó ayuda en reiteradas oportunidades pero la Justicia no lo internó.

"En la tarde del miércoles tuvo comportamientos agresivos en el domicilio y por una denuncia de la familia el personal de la Comisaría 4ta. de San Fernando lo trasladó a la dependencia y lo liberó poco después por orden de la fiscalía", le indicaron a CRONOS. "Cañete debía estar internado y no en las calles, esta tragedia se pudo evitar", sentenciaron.