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Audios increíbles

Desbarataron una organización que desde la cárcel vendía drogas y se dedicaba a la "sextorsión"

Uno de los presos cuenta con numerosos antecedentes y lo investigan por homicidio. Otro cumple cadena perpetua por un homicidio de 2012. Sus parejas ingresaban los estupefacientes al penal y los ocultaban en sus cuerpos.

23 nov 2023

Old James

Las cárceles de Argentina tienen una llamativa particularidad que los hace casi únicos en el mundo: a los presos se les permite tener teléfonos celulares. La medida que había sido tomada durante la pandemia nunca se revocó a pesar que se comprobó que con ellos delinquen y amenazan a sus víctimas. En Mar del Plata, en la Unidad 15 de Batán, dos reclusos son prueba de esto y fueron descubiertos gracias a cientos de horas de escuchas telefónicas.

Luego de una larga investigación que realizó la División de Crimen Organizado de Mar del Plata, a cargo del Comisario Inspector Nicolás Hernández, con la intervención del Dr. Leandro Favaro, a cargo de la Fiscalía especializada en Estupefacientes, se allanaron algunas celdas en Batán y domicilios extramuros, para desbaratar una organización que se dedicaba a la venta de drogas, las estafas y la extorsión.

Durante los operativos que se realizaron en viviendas de Mar del Plata, los oficiales detuvieron a tres sospechosos, dos de ellas mujeres, una de las cuales, de 65 años, tenía el beneficio del arresto domiciliario y monitoreo con pulsera electrónica.

Los cabecillas de la banda también fueron identificados y serían dos hombres que se encuentran detenidos en la Unidad Penitenciaria Nro. 15 de Batán, en las afueras de Mar del Plata. Los sospechosos ya fueron notificados por estas nuevas acusaciones.

Fuentes cercanas a la investigación informaron que con el aval de la Justicias de Garantías, se intervinieron diez líneas telefónicas y se grabaron un total de 41 CDs con escuchas que fueron fundamentales para el avance de las pesquisas y la recolección de material probatorio de los delitos que se les imputa: contrabando y venta de estupefacientes, estafas, amenazas y extorsión.

Los detenidos

Johnatan Lettieri, de 32 años, tiene un frondoso prontuario y en 2021 fue acusado del homicidio de Javier Caballero. El crimen ocurrió en una casa usurpada en Mar del Plata. Lettieri, según fuentes del diario La Capital de la ciudad balnearia, era investigado desde hace tiempo por la Fiscalía de Estupefacientes.

Los detectives de Crimen Organizado corroboraron que el reo contaba con una cómplice que operaba desde el exterior: la mujer sería su pareja y fue identificada como Karina "Karen" T. Esta sospechosa sería la encargada de ingresar las drogas al penal ocultas en su vagina.

En distintas tareas de seguimiento que se realizaron sobre la acusada, el personal policial detectó que "Karen" hacía paradas en una estación de servicio camino a Batán. Están detenciones habrían sido utilizadas para ir al baño del lugar y esconder los narcóticos en su cuerpo.

El segundo interno fue identificado como Carlos Tótaro, quien cumple una condena a prisión perpetua por el asesinato de Norberto Baio, un crimen que ocurrió en la ciudad de Necochea en 2012. Este sujeto también contaba con el apoyo de su pareja, identificada como Sara G., que en junio fue detenida cuando transportaba cocaína hacia el Penal de Batán.

Los hombres, además de estar acusados de comercializar estupefacientes dentro de la cárcel, son sospechosos de organizar una operación de narcomenudeo en el exterior.

Otros de los delitos que se les imputa son los de amenaza y extorsión. A través de los teléfonos celulares y mediante las redes sociales, se hacían pasar por jóvenes mujeres para contactar hombres. Estos eran engañados y luego de que entregaban fotos íntimas, les exigían dinero para no difundirlas. El dinero que obtenían con los chantajes los cobraban a través de billeteras virtuales, indicaron fuentes de la investigación.

En los allanamientos que se realizaron en los últimos días, personal de Crimen Organizado y de la Policía bonaerense incautaron cocaína y una balanza de precisión; teléfonos celulares, armas y proyectiles; también cuadernos que son un material importante para continuar con la investigación.

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