Mientras todas las miradas lo observan, el Intendente de Olavarría afirma que “no tiene miedo” a una destitución

El intendente de Olavarría, Ezequiel Galli, vive momentos tensos tras el trágico recital del Indio Solari, que terminó con la vida de dos personas. Sin embargo, el joven jefe comunal enrolado en Cambiemos, se mantuvo firme: “No tengo miedo a una destitución”, declaró hoy, y acusó a la productora de excederse en la venta de entradas: “Tenía autorizadas 155 mil y expidió, por lo menos, el doble”.

Más allá de la repercusión nacional, en la política local, el Concejo Deliberante analiza que pasos tomar ante la crisis. El escenario muestra que a Galli le responden sólo cinco de los veinte concejales de Olavarría y necesita por lo menos dos más para alejarse de los dos tercios necesarios para habilitar una acción en su contra.

La oposición, por ahora, manifiesta la voluntad de accionar contra él en voz baja, ya que nadie quiere parecer que saca un beneficio politico de dos muertes.

Si el intento de un juicio político contra Galli fracasa, la oposición maneja otra alternativa: impulsar una comisión investigadora que produzca informes y dañe la figura del intendente, a meses de las primeras elecciones de medio termino.