En un clima tenso y con advertencias de Provincia, fracasó el primer encuentro paritario docente

La reunión se realizó en el Ministerio de Economía, donde asistieron segundas líneas de los gremios docentes y representantes del Gobierno provincial. La administración de María Eugenia Vidal puso sobre la mesa la oferta de incremento salarial de un 18 por ciento en cuatro cuotas, que incluye la “cláusula gatillo” para ajustar esta pauta de acuerdo con la inflación, cifra que fue rechazada de plano por los gremios docentes.

“Aceptar hoy esta oferta, es condenar a los docentes a que comiencen el 2017 con más del 10% de reducción de su salario y no lo vamos a permitir”, aseguró Mirta Petrocini, titular de la FEB.

“La oferta sería alrededor de $250 de aumento por trimestre, dependiendo de la carrera docente y cobrándose el último tramo en noviembre. Esto no alcanza siquiera para pagar el tarifazo reciente de la luz. El Gobierno de Vidal está muy lejos de ofrecer lo que necesita un docente para vivir dignamente", dijo por su parte María Laura Torre, Secretaria Gremial del SUTEBA.

Más temprano, desde el gobierno provincial calentaron el escenario con una seria de dichos salidos desde la Gobernación. Según pudo saber CRONOS, desde Calle 6 afirmaron que “el diálogo es posible entre quienes tienen voluntad de acordar” e instaron a los gremialistas a “defender el interés genuino de sus representados”. “Si el interés de llegar a un acuerdo es genuino, nos vamos a poner de acuerdo”, afirmaron desde el Ejecutivo provincial.

Así mismo, salieron con los tapones de punta y apuntaron directamente contra el titular de Suteba, Roberto Baradel. "Si el interés (de Baradel) no es gremial y es político, no nos vamos a poner de acuerdo. Y Baradel hace política. No defiende el verdadero interés de los maestros”, deslizaron fuentes de Gobernación.

En ese sentido, destacaron que el aumento de 18 por ciento “es bueno” y que “es el piso, no el techo” y “que está atado a la inflación”. Así, resaltaron que ese porcentaje fue aceptado por la mayoría de los trabajadores y gremios.

Para dejar las cosas claras, desde la administración de Vidal optaron por un viejo recurso que también plasmaron durante la gestión de Daniel Scioli ante escenarios tensos con los docentes. “Baradel es kirchnerista y no quiere que al gobierno le vaya bien. Está en contra de todo”, bramaron desde las primeras planas de Gobernación. A modo de chicana, agregaron en una segunda ráfaga: “Baradel es preceptor, no es maestro y nunca estuvo al frente del aula”.

El escenario se puso tenso de entrada, la primera reunión fracasó. “Nuestro modelo es a favor del presentismo de los docentes, con evaluación y sin actos políticos en las escuelas”, arguyeron desde el gobierno provincial. Dato no menor, según pudo saber CRONOS, anunciaron que se descontaran los días de paro, si es que los hay y que “no se devolverá el dinero”.