El presidente Mauricio Macri se metió de lleno en la campaña bonaerense y recibió en la Quinta de Olivos a 64 de los 69 intendentes bonaerenses de Cambiemos y a la gobernadora María Eugenia Vidal.
El encuentro, además, tenía como fin evitar posibles fugas luego de lo sucedido en Córdoba, donde el radicalismo irá con dos listas separadas, significando un fuerte quiebre para Cambiemos en una Provincia que fue clave para el triunfo de Macri en 2015.
De la reunión, que duró aproximadamente 1 hora y 20 minutos, también participaron el jefe de Gabinete de la Nación, Marcos Peña, y el ministro del Interior, Rogelio Frigerio. En tanto, la mano derecha de Vidal, Federico Salvai, se ausentó del cónclave.
A la quinta ubicada en Vicente López llegaron la mayoría de los alcaldes, tanto radicales como del PRO, desde distintos puntos de la Provincia, aunque hubo algunas ausencias notorias.
El jefe comunal de Mar del Plata, el polémico Carlos Arroyo, fue uno de los que no viajó al cónclave. Su faltazo no es demasiado llamativo, teniendo en cuenta la complicada relación que mantiene con los gobiernos nacionales y provinciales, sumado a la intención de Vidal de apoyar a otro candidato para la intendencia.
Tras el encuentro, los encargados de hablar ante la prensa fueron el vicegobernador bonaerense y titular de la UCR provincial, Daniel Salvador, y el intendente de Vicente López y flamante presidente del PRO bonaerense, Jorge Macri.
“No me quedaría en la anécdota de Córdoba para describir Cambiemos. Cambiemos es mucho más amplio que una discusión electoral que no tuvo el mejor final, pero hay que seguir adelante. Cambiemos está tremendamente sólido, la relación entre intendentes con el vicegobernador, con la Gobernadora”, sostuvo Jorge Macri, y agregó: “Jamás se puso en duda en la Provincia el valor que tiene trabajar desde Cambiemos y el compromiso de cada uno de los intendentes”.
Respecto a la reunión, el primo del Jefe de Estado señaló que se repasaron “aspectos de gestión y políticos”. “Tener un Presidente y una Gobernadora que escuchen siempre, dispuestos a la opinión, es muy valioso”, resaltó Jorge Macri.
"Simplemente nos pidió que hiciéramos lo que estábamos haciendo, que es lo que nos da el valor y valoración por parte de la sociedad. Aunque sepamos que el camino es difícil, sabemos que el fin que perseguimos es el correcto, salir de la mentira, de la corrupción, del populismo, del cortoplacismo", agregó el alcalde de Vicente López. .
El almuerzo en Olivos es la segunda vez en la misma semana donde Macri se involucra de lleno en el territorio bonaerense. El pasado lunes arribó a La Plata para participar de una reunión de Gabinete ampliado de Vidal, con legisladores, y este viernes reunió a los intendentes.
El objetivo es claro: Macri busca mantener a todos alineados atrás de su candidatura y evitar más rupturas. Es que, además de lo sucedido en Córdoba, todavía no está cerrada la herida por el no desdoblamiento de las elecciones en la Provincia y el temor al arrastre negativo que puede generar Mauricio Macri en las intendencias, teniendo en cuenta los números de las encuestas, está presente en muchos alcaldes.
Como ya se sabe, el territorio bonaerense es clave a nivel electoral. Representa el 38 por ciento del padrón, por lo que Cambiemos no puede arriesgarse a hacer una mala elección si el fin es tener por cuatro años más el Sillón de Rivadavia.
De esta manera, Mauricio Macri se dispone a jugar fuerte, remarcar que el camino es el correcto y que hay que “ratificar el cambio” iniciado en 2015.