Diego Santilli renunció este viernes a su banca en la Cámara de Diputados para asumir como nuevo ministro del Interior del gobierno de Javier Milei. La decisión se formalizó en Casa Rosada, donde el funcionario comenzó su gestión con reuniones junto a los gobernadores de Chubut, Ignacio Torres, y de Catamarca, Raúl Jalil, para analizar el Presupuesto 2026 y las reformas que impulsa la administración libertaria.
El cambio forma parte de la reestructuración del gabinete nacional tras la victoria del oficialismo en las elecciones legislativas. Santilli, que había sido reelecto por la alianza entre La Libertad Avanza y el PRO, adelantó su salida del Congreso para dedicarse de lleno a su nuevo rol: tender puentes entre Nación y las provincias, un desafío clave en la etapa que se viene.
En su lugar en la Cámara baja asumirá Nelson Marino, exconcejal platense y hombre de confianza de Horacio Rodríguez Larreta, mientras que Rubén Torres, dirigente cercano al libertario Sebastián Pareja, ocupará la banca correspondiente al bloque por el que Santilli fue reelecto. De esta forma, el oficialismo busca mantener cohesión en el nuevo escenario parlamentario.

A pocas horas de jurar, el flamante ministro estrenó su despacho en Balcarce 50 con una agenda intensa. Su primer visitante fue Ignacio Torres, quien llegó para discutir los lineamientos del Presupuesto 2026 y las reformas laboral y tributaria que el Ejecutivo planea enviar al Congreso. El encuentro también incluyó la continuidad de los acuerdos para eliminar las retenciones a los hidrocarburos.
“Fue una reunión positiva, hay voluntad de diálogo y de revisar cada punto del Presupuesto”, aseguró Torres tras el encuentro. El gobernador valoró la designación de Santilli, a quien definió como “alguien con experiencia y capacidad para construir consensos”, y destacó que el gobierno nacional mantendrá los compromisos asumidos por la gestión anterior.
Torres explicó que el entendimiento con Nación implica que, a cambio de la quita de retenciones, Chubut reducirá regalías y las empresas reinvertirán el ahorro fiscal, con participación de los trabajadores en un plan de competitividad. “Nos vamos con la tranquilidad de que el compromiso sigue firme y que el decreto que lo formaliza está a punto de firmarse”, cerró el mandatario patagónico.