“Dolió mucho”: intendentes respaldaron a Kicillof después de las críticas de Cristina tras la derrota electoral

Axel Kicillof, gobernador de la provincia de Buenos Aires, se reunió este viernes con cerca de 40 intendentes del Movimiento Derecho al Futuro (MDF) en Berazategui. Allí, los jefes comunales respaldaron al mandatario después de haber sido acusado como responsable de la derrota electoral por Cristina Kirchner.

La reunión, que se extendió por unas dos horas, se había previsto inicialmente en la sede de Gobernación pero se trasladó de manera imprevista. Kicillof llegó alrededor de las 15.30 y escuchó a los jefes comunales más cercanos, quienes plantearon su visión sobre la situación política posterior a los comicios y la necesidad de tomar decisiones urgentes ante un contexto electoral adverso.

Desde el entorno del gobernador remarcaron que el encuentro no solo buscaba evaluar el impacto de las elecciones del 7 de septiembre y del 26 de octubre, sino también anticipar los pasos a seguir frente a la dinámica de la política nacional, marcada por la irrupción de Javier Milei y la consolidación del antiperonismo en distintas localidades. La planificación incluye la estrategia legislativa y el fortalecimiento territorial del oficialismo.

Desde la reunión trascendió que calificaron como “inapropiada” la acusación de CFK contra el gobernador y que dolió “mucho”, al considerar que desmerece el trabajo territorial de los intendentes durante la campaña. Además, tomaron la reunión como conveniente para evaluar los resultados y analizar la participación electoral, con foco en los cambios de votantes entre las fechas.

Los jefes comunales expresaron su malestar por la exclusión de varios de ellos de la lista de diputados y por las críticas del cristinismo. Según fuentes presentes, coincidieron en que el desdoblamiento de las elecciones permitió proteger los concejos deliberantes y la Legislatura provincial, aunque reconocen que la decisión generó tensiones con La Cámpora.

En ese marco, se planea presentar el lunes un presupuesto acompañado de un comunicado que ratifique el respaldo a Kicillof y marque distancia con la agrupación juvenil. El encuentro dejó claro que el oficialismo bonaerense busca recomponerse y organizarse para los próximos años.

Kicillof escuchó las advertencias de los intendentes y recibió sugerencias sobre cómo enfrentar los desafíos internos y externos. El mensaje es contundente: no hay margen para dilaciones, y la gestión apunta a consolidar su base territorial antes de la siguiente contienda electoral.