De la mano de Insaurralde y el randazzismo, Vidal cerró acuerdo para aprobar Presupuesto 2018

En medio de un escenario calmo, sin grandes alteraciones y con un peronismo casi domado tras la derrota electoral de octubre, la gobernadora, María Eugenia Vidal se encamina a aprobar el Presupuesto 2018 y la Ley Impositiva. Un “tratamiento exprés”, como ella quería, un trámite de la “Ley de leyes” más fácil es sus dos años de gobierno.

Las últimas negociaciones se dieron de la mano del presidente de la Cámara de Diputados, Manuel Mosca, quién se reunió primero con el intendente de Bolívar, Eduardo “Bali” Bucca y después con los alcaldes enviados por Martín Insaurralde.

En el cónclave, que también participó el ministro de Infraestructura, Roberto Gigante, estuvieron los intendentes Juan Pablo De Jesús (La Costa) y Hugo Corvatta (Saavedra). Ellos mismos, la semana pasada, acompañaron a Insaurralde a una reunión de acercamiento que tuvieron con el jefe de Gabinete, Federico Salvai.

Nos reunimos con el ministro @RobertGigante, Luis Gimenez e intendentes. Seguimos dialogando con la oposición para alcanzar consensos. pic.twitter.com/nlqj7l5FOy

— Manuel Mosca (@manu_mosca) 13 de noviembre de 2017

Según trascendió, durante el cónclave se comenzó a cerrar las pautas para un acuerdo fue un principio de concordancia sobre el Fondo del Conurbano y las compensación que ofreció Nación la semana pasada a la provincia de Buenos Aires. Desde el oficialismo deslizaron que de cerrarse al acuerdo con el Gobierno Nacional por los 40.000 millones de pesos que ingresarían para 2018 ingresarán, de los cuales 3.200 millones de pesos que irían directo a los municipios a través de la coparticipación.

Además, al igual que con el acuerdo con Sergio Massa y 1País, se cimentó las bases para bajar el monto del Fondo Educativo que los municipios tendrán que destinar a obras en las escuelas. Del 85 por ciento se pretende bajar al 50 por ciento para el Conurbano y 40 por ciento para el Interior. Así mismo, Cambiemos accedió a poner un tope a la participación público-privada (PPP) en la obra de infraestructura que licita el gobierno. Cabe recordar, que la Provincia adhirió a la ley nacional que establece un régimen para fomentar la inversión de empresas privadas en obras de infraestructura de gran envergadura en sociedad con el Estado.

Finalmente Insaurralde logró posicionarse como el nexo entre parte del peronismo y Calle 6 para sellar las bases de la aprobación del Presupuesto 2018. La tropa peronista se encuentra sucumbida en sus divisiones internas, acrecentadas por la derrota de Cristina el 22 de octubre. De los tres bloques que hay en Diputados (FpV, FpV-PJ y Peronismo para la Victoria) y los dos del Senado (FpV-PJ y Bloque Peronista), no sólo está la división de bancada, sino también puertas para adentro en cada bloque. El efecto de las discrepancias caló incluso en La Cámpora. Del otro lado de la vereda, quedaron los esfuerzos del titular del PJ bonaerense, Fernando Espinoza y la intendenta de La Matanza, Verónica Magario de juntar a todo el peronismo y bloquear una votación exprés.

Pero para poder aprobar la “Ley de Leyes”, Cambiemos debe lograr acuerdos con otros sectores para así alcanzar los dos tercios de los votos necesarios en ambas Cámaras (62 diputados y 31 senadores). Massa y 1País aportan sus votos en ambas Cámaras, como así los monobloques. También el flamante y exiguo bloque Peronismo Renovador en el Senado (cuatro legisladores que pegaron el portazo al Frente Renovador). Pero sin dudas, son claves los votos del peronismo, traídos por Insaurralde y los intendentes que lo acompañan. De allí surgen votos de los bloques FpV-PJ en Diputados y Senadores, y del FpV (la que está hegemonizada por La Cámpora) y de los bancadas randazzistas Peronismo para la Victoria y Bloque Peronista.