El Gobierno bonaerense oficializó la emisión de bonos en pesos por hasta $30.000 millones con el objetivo de afrontar vencimientos, regularizar pagos y sostener obras públicas e inversiones estratégicas en la provincia de Buenos Aires. La medida fue dispuesta por el Ministerio de Economía a través de la Resolución Nº 421, publicada en el Boletín Oficial, y se inscribe en el marco de las autorizaciones vigentes para el uso de instrumentos de financiamiento.
Los “Bonos en pesos a tasa variable” tendrán un plazo de dos años, con fecha de emisión el 7 de agosto de 2025 y vencimiento en agosto de 2027. Contarán con un período de gracia de un año para el capital, y su amortización se realizará en cuatro pagos trimestrales entre noviembre de 2026 y agosto del año siguiente. Los intereses estarán atados a la tasa Badlar de bancos privados, lo que implica un rendimiento variable vinculado al comportamiento del mercado financiero.
El Banco Provincia será el agente financiero y la Caja de Valores actuará como depositaria, mientras que los bonos se emitirán en formato global. Como respaldo, estarán garantizados con fondos provenientes del Régimen de Coparticipación Federal de Impuestos, un elemento que da mayor seguridad a los acreedores y favorece la colocación de los títulos en el mercado local.

Desde el Ministerio de Economía señalaron que esta herramienta responde a una necesidad concreta: “Regularizar atrasos en obligaciones de Tesorería y dar previsibilidad al flujo de pagos del Estado”, explicaron. Además, remarcaron que los bonos ofrecen una alternativa para los proveedores o contratistas del Estado que enfrentan demoras en los cobros, brindándoles una vía para preservar su liquidez y continuidad operativa.
La decisión también está alineada con la Ley 15.480, que autoriza al Ejecutivo bonaerense a endeudarse por hasta el equivalente a USD 1.800 millones para refinanciar pasivos y atender necesidades presupuestarias. En ese contexto, la Provincia ya había aprobado a comienzos del año la posibilidad de emitir hasta $500.000 millones en títulos de mediano y largo plazo, por lo que esta colocación se enmarca en un plan más amplio de gestión financiera.
En paralelo, desde la administración provincial destacan que el uso de deuda en moneda local contribuye a fortalecer el mercado financiero interno y reduce la exposición a riesgos cambiarios. “Son decisiones que buscan ordenar el perfil de vencimientos, asegurar el financiamiento y sostener obras esenciales en un contexto fiscal muy exigente”, concluyeron desde la cartera que conduce Pablo López.