Mientras las autoridades de gobierno porteño están ocupadas para conservar el poder y el territorio que le pretende disputar el gobierno nacional, la violencia y la inseguridad que desde hace varios años golpea al Conurbano bonaerense se trasladó, se instaló y se presentó con sorprendente fuerza en la Ciudad de Buenos Aires.
A pesar que es el distrito que cuenta con el presupuesto más alto para invertir en seguridad, los barrios de la zona sur están padeciendo un accionar criminal que tiene a los vecinos aterrados y con la necesidad de recibir respuestas positivas del poder político, que fue elegido para solucionar los problemas sociales, de la Justicia y la policía.
Uno de los barrios que más sufre el desamparo estatal es Barracas, donde los robos a viviendas y los asaltos callejeros están en alza.
En el atardecer de este domingo dos mujeres, madre e hija, fueron atacadas por jóvenes delincuentes que portaban armas de fuego y actuaron de manera brutal.
El violento atraco ocurrió alrededor de las 20 cuando estacionaron el vehículo sobre la calle Santa María del Buen Aire al 300. La de mayor edad descendió del rodado y antes de poder cerrar la puerta del acompañante fue sorprendida por uno de los sujetos que la tomó de los brazos y la zamarreó, la empujó contra el rodado y luego la arrojó al suelo.
La mujer cayó de espaldas y el golpe de la cabeza contra las baldosas pudo resultar en una tragedia que solo por un milagro no ocurrió.
Al mismo tiempo los cómplices rodearon a la hija y uno de ellos le apoyó la pistola en el pecho para obligarla a abandonar el habitáculo. Finalmente la mujer fue retirada con tirones y en ese momento gritó desesperada cuando observó a la madre abandonada en la acera.
Cuando los cobardes se apoderaron del automóvil y el drama pareció llegar al final, el calvario de las mujeres continuó porque los ladrones no supieron manejar la caja automática.
De inmediato abandonaron el rodado y se lanzaron sobre madre e hija, las encañonaron y a la más joven la sujetaron del pelo con rudeza, les quitaron las carteras y otras pertenencias, y luego escaparon a la carrera en sentido a la Av. Australia.
Hasta el momento se mantienen prófugos aunque algunos vecinos señalaron que los van a encontrar si los buscan en la Villa 21-24, ubicada a pocas cuadras del lugar.