En busca de continuar con su plan de ajuste, el gobierno de Javier Milei anunció un nuevo esquema de distribución de subsidios al transporte público, vinculado a la demanda del servicio, para el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
La decisión se dio a conocer a través de la Resolución N°45/2024, publicada en el Boletín Oficial. En ese sentido, la nueva metodología busca distribuir las compensaciones destinadas a las líneas de transporte del AMBA, agrupándolas en categorías tarifarias específicas ajustadas a los costos y al uso real del servicio.
Según se expresa en la norma, esta clasificación permitirá un reparto de subsidios basado en la demanda y en los ingresos generados, aplicando una “Tarifa Teórica de Referencia” para lograr mayor equidad y transparencia en el proceso.
Asimismo, para definir los subsidios la metodología clasifica los costos en dos categorías: costos variables y costos fijos. Entre los costos variables se incluyen gastos como combustible, mantenimiento y parte del salario del personal, los cuales dependen directamente de los kilómetros recorridos. Los costos fijos, por otro lado, abarcan seguros, impuestos, y otros gastos administrativos y operativos que no dependen de la distancia.
Por tanto, los subsidios se distribuirán ahora por grupo tarifario de manera independiente. Además, la compensación tarifaria se distribuirá en función de los kilómetros efectivamente recorridos por cada línea de transporte, datos que serán reportados por Nación Servicios S.A.
Para asegurar la precisión, estos kilómetros serán ajustados por factores de estacionalidad y corregidos según el margen de error de los GPS instalados en los vehículos. La modificación en la forma de distribuir los subsidios se da a partir de un informe de la Auditoría General de la Nación del 2017, en el que recomendó “instruir las medidas necesarias para dotar de celeridad al proceso de redireccionamiento de los subsidios a la demanda del servicio”.