La violencia y la inseguridad mandan en la provincia de Buenos Aires y, a pesar de los continuos e indignados reclamos, los vecinos no encuentran respuestas de la política y la Justicia. A la prensa escrita y audiovisual no le alcanza el tiempo para procesar y corroborar los datos de las decenas de denuncias que cada día envían desesperadas víctimas.
Bandas criminales y rateros, conocedores del poco o deficiente patrullaje policial, de día y de noche recorren con impunidad el Conurbano y cualquier botín les viene bien para robar. En los últimos días las cámaras de vigilancia instaladas por las víctimas u otros particulares, registraron pequeños atracos que generan bronca, fastidio y grandes dolores de cabeza.
Villa Bosch
En el amanecer del lunes, a las 6:40, dos malandras muy jóvenes le robaron las bicicletas a una familia. Forzaron la cerradura de la puerta que da a la calle e ingresaron al patio de la casa ubicada sobre la calle Gaucho Cruz.
Sin perder tiempo tomaron los rodados que no estaban encadenados y abandonaron el lugar. Un rato después y cuando se preparaban para realizar las actividades del día, la familia detectó que la puerta estaba abierta y que les habían sacado las bicicletas.
El hecho se viralizó en el grupo vecinal creado por los hechos de inseguridad y generó indignación en los participantes: el atraco ocurrió a 100 metros de la Comisaría Tres de Febrero 9na. y la burlada policía no vio nada.
Villa Madero
En la madrugada del último viernes una familia fue víctima de un hecho insólito: en el lapso de tres horas le robaron el utilitario en dos oportunidades.
Alrededor de las 2:15 el delincuente caminó por la calle Constituyentes y se dirigió directo a la Peugeot Partner que los propietarios estacionaron a pocos metros de su vivienda. En segundos, como si tuviera la llave, abrió las puertas de la caja y se metió.
Luego de cuatro minutos que utilizó para revisar y buscar pertenencias en el habitáculo, el desconocido escapó a la carrera con el estéreo. Tres horas después el mismo joven habría regresado por más.
La cámara de vigilancia estableció que a las 5:14 se acercó al utilitario, levantó la tapa del motor y a las 5:15 se alejó con la batería del vehículo.
Rafael Castillo
El último caso ocurrió este lunes antes del mediodía. Un sujeto al que apodarían "el Gitano" y se movilizaba en una moto de baja cilindrada, le sacó la batería a un Fiat 600 que estaba estacionado sobre la calle Cjal. Settino.
El rastrero se acercó a la vivienda en la que vive el dueño del "Fitito" y tras observar que no había movimientos comenzó la faena criminal. Forzó la puerta izquierda y abrió el baúl donde no encontró nada de su interés, a continuación levantó la tapa trasera y en pocos segundos se llevó el dispositivo eléctrico.
Entre los vecinos que observaron el video se pudo destacar que varios identificaron al sujeto y afirmaron que su nombre es Mario. Otros aseguraron que también les había robado el auto en soledad o acompañado por un hijo que estaría preso por robo.
"Vive sobre la calle Zamudio, todos lo conocen, no hace otra cosa que no sea delinquir", aseguró un hombre.