El gobernador Axel Kicillof atraviesa horas muy complejas y, luego de unas semanas álgidas, mantuvo una reunión con su Gabinete en La Plata. En dicho encuentro, les dejó en claro que se viene un año con ajuste y restricciones dentro de cada Ministerio.
De acuerdo a lo averiguado por CRONOS, el ministro de Economía Pablo López detalló los efectos que puede producir en la administración provincial una caída de la recaudación que en el gobierno bonaerense dan por hecho.
En ese sentido, en los pasillos de la Gobernación se comentó que Kicillof les garantizará únicamente los salarios de los trabajadores, aunque después cada ministro deberá trabajar con un presupuesto de restricción. De esta forma, cada funcionario estará obligado a presentar ante el gobernador qué priorizar y cómo reestructurar los programas para que puedan continuarse en un escenario de escasez.
Asimismo, Kicillof le pidió a cada uno de sus ministros que avancen con reuniones con sus pares nacionales para conocer cuáles serán los programas nacionales que continuarán. De igual manera, varios de ellos se mostraron quejosos, ya que Nación no tiene datos concretos aún, por lo que sus gestiones se ven obligadas a frenar.
CRONOS pudo saber que Jorge D’Onofrio y Alberto Sileoni han sido los ministros que contaron con reuniones privadas con funcionarios nacionales. El primero tuvo la confirmación de que los subsidios al transporte dejarán de existir, aunque no sabe cuándo lo anunciarán. El segundo habría confirmado la continuidad del Programa de Infraestructura Escolar y de la implementación de la quinta hora.

No obstante, el mandatario provincial también hizo eje en el aumento de la conflictividad social en las regiones más humildes de la Provincia. Andrés Larroque, titular de la cartera de Desarrollo de la Comunidad, le dejó claro a Kicillof que la situación en el Conurbano es muy grave y que está multiplicando los esfuerzos para contenerlo.
Por tanto, Kicillof pretende que cada ministro apunte a una estrategia para que la crisis no se lleve puesto todo y que la gestión bonaerense no quede reducida sólo a la prioridad de pagar salarios y sostener lo esencial en cuanto a las prestaciones estatales. El gobernador les pide creatividad e ideas para sostener programas, obras y proyectos para dar cuenta de la importancia del Estado presente, sobre el que tanto critica el Presidente de la Nación.