Motochorro, asesino y cobarde: le disparó a quemarropa porque se resistió al robo y lo golpeó

"Los guapos se terminaron cuando se inventó la pólvora", afirma una frase popular que describe el brutal homicidio de Hernán Damián Acosta, a las 5 de la tarde, en la zona sur del Conurbano bonaerense. El hombre de 49 años fue fusilado cuando golpeó al ladrón que le intentaba robar la moto, una Honda Tornado.

Hernán Acosta era chef y trabajaba en "Marcelo Restaurante", un local ubicado en la calle Alicia Moreau de Justo al 1100, en Puerto Madero. Este jueves, cuando acabó el turno matutino y regresaba a su domicilio en el partido de Florencio Varela, fue atacado en la zona de Quilmes oeste.

Hernán Damián Acosta, era amante de las motos y del entrenamiento en el gimnasio

Los dos delincuentes también se desplazaban en moto y lo siguieron varias cuadras hasta que en la intersección de Av. Calchaquí y Jujuy lo derribaron.

El que viajaba como pasajero, sin casco, saltó del rodado y lo amenazó con un arma de fuego para que se aleje. Algunos testigos afirmaron que accionó el arma pero la bala no salió. Lo que ocurrió a continuación fue registrado por un vecino con un teléfono celular y es el video acompaña esta nota.

El sujeto cambió de posición con el cómplice que le entregó la moto en la que llegaron y recibió el arma de fuego. Con la cara cubierta por el casco se acercó a la Tornado y le apuntó a Acosta que les gritaba desde la esquina.

"Tirá, tirá, dale tirá", les repitió varias veces la víctima.

#Motochorros asesinaron a un joven para sustraerle la moto. La víctima se resistió, golpeó a un ladrón con el casco y este le disparó en el tórax. Ocurrió este jueves en #Quilmes oeste. Los homicidas estarían identificados@JaviAlonsook @MinSeg @justiciayddhhBA #CronosNoticias pic.twitter.com/yEpmASkH9M

— Cronos Noticias (@Cronos_Noticias) December 15, 2023

El delincuente se guardó el arma en la cintura, levantó la moto, se subió y cuando la encendió ocurrió lo que no esperaba y no se bancó: Hernán Acosta, amante de las motos y del gimnasio, corrió hacia él, lo golpeó con su casco y lo tiró al pavimento.

El cobarde extrajo el arma y otra vez le apuntó, no aceptó el convite al "mano a mano" que le hizo Hernán y lo asesinó a sangre fría con un disparo en el tórax.  

El chofer y los pasajeros del colectivo de la línea 148, que estaba detenido en la esquina, no podían creer lo que acababan de ver y se agacharon en los asientos. Los circunstanciales testigos que caminaban por el lugar, les gritaron e insultaron al homicida que no se amilanó y los amenazó con el arma de fuego. 

Un hombre y una señora de mayor edad fueron los primeros en auxiliar a Hernán Acosta que cayó de espaldas sobre la vereda. Un llamado al número para emergencias 911 convocó a móviles de la Comisaría 3ra. y a una ambulancia del SAME que habría demorado alrededor de 20 minutos en llegar.

El hombre herido fue trasladado al Hospital Dr. Isidoro Iriarte de Quilmes donde ingresó en estado desesperante y, a pesar de los esfuerzos del personal de salud, perdió la vida pocos minutos después.

Los asesinos, por orden del Dr. Jorge Saizar, titular de la UFI Nro. 5 de Quilmes, son intensamente buscados por personal de la DDI de Quilmes. Los detectives los tendrían identificados y en la noche realizaron varios allanamientos en domicilios donde podrían haber encontrado refugio.

"Son investigados por otros asaltos con la misma modalidad pero que no tuvieron este final", aseguró una fuente con acceso a la causa. "Uno es apodado "el Sapo", el que no usaba casco", agregó el informante.

El fiscal Saizar abrió un expediente caratulado "homicidio en ocasión de robo".