Motochorros y estafadores: se les escapó un tiro, le robaron el auto y le saquearon la billetera virtual

Carlos S. tiene 64 años y como ocurre con muchos otros en la provincia de Buenos Aires, su nombre figura en dos estadísticas: de la desocupación y de la inseguridad. La tarde del sábado, alrededor de las 17, fue abordado por delincuentes en moto que le sustrajeron el VW Virtus, entre otras pertenencias, además de la mercadería que había cargado en el baúl y tenía que entregar.

"Soy visitador médico pero la empresa en la que me desempeñaba me echó y con mi edad es muy difícil conseguir una ocupación, me falta un año para la jubilación", le confió Carlos a CRONOS. "Es por esto que me decidí a hacer esta "changa" con mi amigo y trabajar de delivery", agregó.

Matías le ofreció a Carlos repartir las picadas que prepara y el fin de semana, cuando cargaban los paquetes en el auto, dos violentos motochorros los atacaron en la esquina de Ingeniero White y Bulnes, en la localidad de El Palomar.

La moto se detuvo al lado del Virtus y Matías, que tenía medio cuerpo dentro del baúl, levantó la cabeza y miró de frente el cañón de una pistola.

"Levantá las manos, dale, dale", le dijo a Carlos el pasajero que se tiró de la motocicleta. A continuación los amigos vivieron 35 segundos de terror.

Tremendo ataque de #motochorros en #ElPalomar. Ocurrió la tarde del sábado y, además del vehículo, los delincuentes se llevaron otras pertenencias y documentación personal de las víctimas. El auto fue hallado horas después en Caseros@LucasGhi @MunicipioMoron #CronosNoticias pic.twitter.com/2okwYTJ0GA

— Cronos Noticias (@Cronos_Noticias) December 5, 2023

El sujeto que portaba el arma se quedó con Carlos, lo bolsiqueó y le exigió las pertenencias que estaban en el habitáculo. Al mismo tiempo el cómplice abordó a Matías que se arrojó al pavimento como muestra de rendición. El delincuente lo palpó y buscó lo que no encontró: algo que rapiñar.

"Mi amigo no tenía nada encima, estábamos a metros de la casa y salió sin nada", aseguró Carlos. "El hombre después caminó hacia mí y me exigió que le de la alianza de matrimonio pero no me la puedo sacar, tengo los dedos muy hinchados. Luego me tocó el cuello y buscó si tenía alguna cadena debajo de la remera", recordó.

En ese instante una detonación sorprendió a víctimas y ladrones por igual: al que portaba el arma se le escapó un tiro que impactó en la puerta trasera izquierda.

El disparo alertó a los vecinos y la sirena de una alarma apuró la huida de los delincuentes que aceleraron el Virtus y la moto por Ing. White, en dirección a la calle Presidente Derqui.

"Una mujer llamó al 911 y un móvil de la Comisaría 6ta. de Morón llegó enseguida. Mientras hablaba con los policías mi hija llamó a Matías al celular y le dio la ubicación de mi teléfono robado mientras hacía el seguimiento en tiempo real", relató Carlos. "Los agentes se llevaron el aparato de mi amigo y mi hija los guio hasta que los delincuentes desconectaron el GPS en la zona de la villa Carlos Gardel, detrás del Hospital Posadas", detalló el hombre.

A través de la compañía de seguros Carlos se comunicó con la empresa que recupera vehículos de manera satelital y el automóvil fue hallado en pocos minutos en la localidad de Caseros.

"Con mi hijo y mi yerno lo fuimos a buscar hasta la calle Parodi, entre Perú y Bolivia, donde nos esperaban dos móviles de la empresa de recupero y una patrulla de la Comisaría 4ta. de Tres de Febrero", destacó el hombre. "Revise el auto y corroboré que le robaron la rueda de auxilio y otras cosas. Del habitáculo se llevaron el teléfono y lo usaron para hacer una compra con la billetera virtual: gastaron más de 40 mil pesos en una compra de bebidas en El Palomar, aunque no se llevaron los paquetes con las picadas", aseguró Carlos.

Además, le sacaron la billetera con los documentos y las tarjetas bancarias, también un estuche con los lentes de aumento.

"Los policías de Tres de Febrero también hicieron un buen trabajo pero no me pude traer el auto hasta el lunes, lo llevaron a la comisaría para que le hagan las pericias por el balazo que tenía en la puerta. Ahora tengo que hacer los tramites para la nueva documentación y esperar a que el seguro me pague la reparación de la puerta y la reposición de los objetos robados", indicó el hombre que no baja los brazos pero le tocó vivir un hecho violento.