"Todos sabíamos que esto iba a ocurrir en Ramos Mejía y no es la primera vez. Espinoza liberó la zona a los delincuentes porque acá perdió las elecciones, nunca las ganó y nunca lo va a hacer. Esta es la manera que encontró para castigarnos", le aseguró un vecino a CRONOS.
La grave denuncia mediática que realizó el hombre, quien nació y vivió siempre en la localidad matancera, es respaldada por muchos otros quienes afirman que están aterrorizados, que salen a la calle solo por necesidad y obligación, entre otras cosas por la impunidad con la que mueven los motochorros.
"Recorren las calles en dos o tres motos, con o sin patentes y cascos, pero a la policía no les llaman la atención, no los paran ni para pedirles la documentación", indicó un abogado de la zona.
La noche del domingo, alrededor de las 21:30, Antonella y Matías estaban a bordo de una VW Taos que habían estacionado sobre la calle Alvear al 2000, entre Humboldt y Agustín de Elía, cuando fueron sorprendidos por delincuentes armados.
La violenta escena fue captada por al menos una cámara de vigilancia privada y en las imágenes se ve la llegada, en contramano y por la calle Alvear, de cuatro sujetos que se movilizaban en dos motocicletas.
Se detuvieron junto a la camioneta y los que viajaban como pasajeros fueron directo a las puertas delanteras con armas de fuego en la mano. La amenazada pareja no se resistió y abandonó el rodado para preservar la vida.
A continuación los motochorros encañonaron a los jóvenes, los bolsiquearon y le sacaron las llaves de la Taos a la mujer. Con el atraco consumado, los delincuentes escaparon en dirección a Lomas del Mirador y hasta el momento la camioneta con dominio AG040HJ, no pudo ser hallada.
Segundo hecho
En otro violento robo que ocurrió el fin de semana, también cuatro motochorros armados, asaltaron a Emiliano Magallanes en la esquina de Sargento Cabral y Gral. Acha.
Los delincuentes lo sorprendieron por la espalda e interceptaron cuando circulaba por la calle Cabral en un monopatín eléctrico. El muchacho, que no resultó herido, fue perseguido al intentar escapar a la carrera y, además del pequeño vehículo, le robaron la documentación personal.
Este segundo caso también quedó registrado por una cámara de vigilancia vecinal y ocurrió a solo 10 cuadras del ataque a la pareja.