Golpizas de motochorros: a un joven lo siguieron y le robaron la moto, a otro lo esperaron en la puerta de la casa

No hay un solo día que los portales de noticias o los canales de televisión no muestren un asalto protagonizado por delincuentes en motos. En las últimas semanas los ataques de motochorros más violentos ocurrieron en alguna de las localidades de La Matanza, quizá el partido más inseguro del Conurbano bonaerense. Los dos videos que acompañan esta nota dan cuenta de increíbles hechos que sucedieron en San Justo y en Laferrere.

Asalto 1

Cuando este jueves se hizo de noche, alrededor de las 20, un motoquero fue arrojado de su vehículo por tres delincuentes que se movilizaban en dos motos. El muchacho circulaba por la calle Condarco y al llegar a la calle Thames al 3800 dobló a la derecha, se quería alejar de los hombres que lo acechaban y había visto por los espejos.

Pero luego de recorrer media cuadra los asaltantes lo encerraron por los costados y con una patada lo bajaron del vehículo. El chico, que no rodó por el pavimento, alzó las manos cuando el motochorro que viajaba como acompañante se le fue encima y lo amenazó con un arma de fuego.

A continuación le sacaron una cadena del cuello y el teléfono celular, también la campera luego de darle un violento golpe en la cabeza. Sin dejar de apuntarle con la pistola, el más salvaje de los rastreros lo obligó a arrojarse al piso y, con sus cómplices, se perdió por las calles de San Justo.

Asalto 2

En las últimas horas trascendieron las imágenes de un llamativo asalto que ocurrió el lunes a las 19:30, en la calle Ruiz de los Llanos al 1900, en Gregorio de Laferrere.

Dos motochorros, por circunstancias que se ignoran, hicieron guardia y durante varios minutos esperaron a que un muchacho muy joven abandone una vivienda.

Apenas la víctima salió a la vereda uno de los ladrones puso en marcha un ataque brutal. Lo interceptó, le apoyó un arma de fuego en el cuerpo, lo golpeó con fiereza y lo puso de rodillas. A continuación lo bolsiqueó hasta que encontró el teléfono celular y algo de dinero en efectivo.

Cuando los motochorros escaparon hacia la esquina de Santa Rosa, donde se encuentra la Escuela Técnica Nro. 7, una mujer que vio robo desde el auto estacionado a pocos pasos, ayudó al muchacho que estaba muy golpeado y no entendía lo que le había pasado.