El ministro de Economía bonaerense, Hernán Lacunza, consideró que el Gobierno logró "sentar las bases para cambiar el vínculo con los gremios", tras cerrar la paritaria con los maestros de la provincia,
Ante meses de conflicto, el funcionario de María Eugenia Vidal, manifestó que "hoy podemos brindar a las familias y a los docentes todo el año certezas sobre las clases, sobre el calendario lectivo, sobre el ingreso que van a percibir los docentes, con este gatillo que les garantiza que no van a perder contra la inflación, o le van a empatar o ganar a la inflación si es menor a ese 21,5%".
En ese sentido, destacó que "no hubo especulación", dijo que "siempre se respetó el valor de la palabra" y subrayó que "no se cerró el acuerdo por decreto y eso es un valor del diálogo como mecanismo de generar consensos. Como dice María Eugenia, creo que más importante que el número es cambiar la lógica de un vínculo que era tortuoso sobre todo para los alumnos y las familias, que terminan siendo rehenes de un conflicto que es entre el Estado y un gremio", analizó.
El acuerdo alcanzado con los docentes bonaerenses ayer es por un aumento de 21,5% a ajustarse con una cláusula gatillo, más un bono de 1.600 pesos por cada cargo, en 2017. Además, pautaron una compensación del 2,5% correspondiente a 2016 y las sumas ya adelantadas a cuenta del aumento, que representan entre $2500 y $4.500, según los cargos.
Si bien ello hace un total de 24 por ciento, los gremios entendieron que la mejora representa una suba del 27,5 por ciento del salario promedio de los docentes, según surge de sumar el 24% de salario consolidado de 2017 y 3,4% por la incorporación de dos sumas fijas: la suma que dieron a cuenta de futuros aumentos, que no será descontada, y el importe que recibirán por material didáctico.