En la mañana de este jueves, alrededor de las 7, se produjo un nuevo hecho de inseguridad en la provincia de Buenos Aires, y en esta ocasión acabó con un delincuente muerto por una bala policial.
El violento suceso comenzó cuando el sujeto subió a una unidad de la línea 501, ramal 11 que llega a la localidad de El Jagüel, con fines de robo.
El malviviente amenazó con un arma de fuego a los pasajeros que llenaban el colectivo y sustrajo algunas pertenencias a los que estaban cerca de la puerta delantera. En medio de la criminal faena y mientras aterrorizaba a los viajeros a los que no dejaba de apuntar con un revólver, el delincuente observó que en el fondo se encontraba un uniformado de la Policía Federal Argentina.
En ese momento el violento ladrón efectuó un disparo que impactó el vidrio de una puerta, se arrojó del ómnibus para intentar escapar y desde la vereda otra vez puso en la mira al efectivo policial.
En ese momento y antes que el malhechor lo balee, el agente de la federal efectuó un certero disparo, a través de una ventanilla, que impactó en la cabeza del joven.
La conmoción y el miedo se hicieron sentir en la intersección de Jewet y la avenida Luis Vernet, en Monte Grande, mientras el uniformado descendía del transporte público y se acercaba al malviviente para desarmarlo.
Un llamado al 911 alertó a las fuerzas bonaerenses sobre lo que estaba ocurriendo y minutos después se hizo presente personal de la Subcomisaría 25 de Mayo.
Según voceros oficiales, el joven baleado fue trasladado al Hospital Municipal Santamarina, de Monte Grande, pero al momento de su ingreso se habría encontrado sin vida. "El chofer del colectivo y el resto de los pasajeros resultaron ilesos", confirmaron las fuentes.
La fiscalía en turno a cargo de la investigación, ordenó el secuestro del revólver que llevaba el delincuente y el arma reglamentaria del efectivo policial, para realizar las pericias de rigor. Hasta el momento no se tomó ningún temperamento con el agente.