Avanza el plan de infraestructura penitenciaria: Kicillof inauguró una alcaidía en Almirante Brown

Esta mañana, Axel Kicillof, gobernador de la provincia de Buenos Aires, encabezó un acto en la localidad de Almirante Brown para la inauguración de una alcaidía departamental destinada para la detención transitoria de aquellos que esperan la resolución de situaciones procesales.

Estuvieron presentes Gabriel Katopodis, ministro de Obras Públicas de Nación; Julio Alak, ministro de Justicia y Derechos Humanos bonaerense; Juan José Fabiani, intendente local; Mariano Cascallares, diputado provincial e intendente en uso de licencia; Paula Montero, directora provincial de Coordinación de Alcaidías Departamentales; y Mariela Paverri, directora de la nueva Alcaidía Departamental.

Allí, Kicillof sostuvo: “Con la construcción de alcaidías buscamos terminar con las cárceles instaladas dentro de las comisarías, brindando mejores condiciones para la detención transitoria y un contacto más sencillo para las familias”.

Además, agregó: “Asumimos en 2019 en el marco de una crisis humanitaria en el sistema penitenciario bonaerense, que tenía una sobrepoblación récord y atravesaba una huelga de hambre que alcanzaba a más de 16 mil internos porque, a partir del ajuste y la desidia, no se proveían los alimentos y los remedios necesarios. A una situación histórica y estructural, que fue agravada durante los cuatro años anteriores, le respondimos con una transformación profunda, que cambia de raíz a nuestro sistema penitenciario”.

“Tenemos un récord de participación de internos en actividades vinculadas a la educación y la formación, y estamos impulsando polos industriales y textiles en las unidades penitenciarias para que, una vez que se hayan cumplido sus penas, todos puedan reinsertarse de manera productiva y solidaria en la comunidad”, afirmó el gobernador bonaerense.

Esto se da en el marco de la segunda etapa del Plan de Infraestructura Penitenciaria, en donde se realizó una inversión de 1.208 millones de pesos para construir la alcaidía, que posee 5.600 metros cuadrados y suma 312 plazas distribuidas en tres módulos de cuatro pabellones cada uno. También se construyeron aulas y talleres para la formación educativa y laboral, un salón de usos múltiples y espacios para la vinculación familiar, teniendo como objetivo la disminución de la tasa de reincidencia.

En este sentido, Katopodis indicó: “Estamos ante la política de transformación penitenciaria más extraordinaria de la historia de la provincia de Buenos Aires, con realidades concretas que dan respuesta a la demanda de nuestro pueblo por una mejor calidad de vida en materia de seguridad. Los problemas se resuelven así, con un programa serio y un Estado que interviene de manera inteligente para articular acciones conjuntas y políticas transversales. La primera apuesta para combatir el delito es crear oportunidades, garantizar derechos y construir sociedades más justas y democráticas”.

Mediante este plan, se finalizó la construcción de 2.436 plazas en una primera etapa. A su vez, en la finalización de la segunda etapa, con la terminación de las obras, se crearán 4.100 nuevas plazas. Por último, se presentó la tercera etapa del proyecto, con la puesta en marcha de 5.500 nuevas plazas que finalizarán en diciembre próximo y completarán las 12 mil durante cuatro años de gestión.

Por su parte, el ministro Alak dijo: “La posibilidad de llevar a cabo 40 obras en 48 meses no es fruto del azar, sino de la decisión política que hemos adoptado para resolver un problema crónico de sobrepoblación en el sistema penitenciario bonaerense. Sumamos programas de identidad, educación y formación laboral para promover la reinserción social y disminuir la reincidencia, contribuyendo así a que siga bajando la tasa de delitos en la provincia”.

En su turno, Cascallares destacó: “Este paso tan importante que estamos dando con toda la comunidad simboliza el esfuerzo que se ha hecho en tiempo récord para garantizarles a los detenidos transitorios un lugar digno, seguro y que permita el contacto con sus familias. Todo esto no es casual, tiene que ver con una decisión política que viene a resarcir una deuda histórica con todos las y los bonaerenses en materia de infraestructura social”.

Finalmente, el mandatario bonaerense concluyó: “Las cárceles no pueden ser un lugar que potencie los motivos que llevaron a muchas personas al delito: apostamos por mejores condiciones para la reinserción social y ya hemos bajado la reincidencia de un 46% al 22%. Este plan de transformación del sistema penitenciario es, sobre todo, una política de seguridad ciudadana para reducir la delincuencia y garantizar la tranquilidad de los y las bonaerenses”, concluyó.

Formaron parte del acto el jefe del Servicio Penitenciario Bonaerense, Xavier Areses; el subjefe, Javier Cáceres; la escribana General de Gobierno, Paula Sidoti; el subsecretario de Política Penitenciaria, José González Hueso; el subsecretario de Inclusión Penitenciaria, Diego Rao; y el director provincial de Infraestructura Penitenciaria, Sergio Reza.

A su vez, también participaron la jefa de gabinete del Ministerio de Trabajo, Cecilia Cecchini; la diputada nacional, María Rosa Martínez; la legisladora provincial Lucía Iañez; el presidente del Tribunal Casación Penal provincial, Daniel Carral; el director de programas del ILANUD en Prevención del Delito y Servicios Penitenciarios para Argentina, Juan Carlos Domínguez Lostaló; y el titular del Colegio de Magistrados y Funcionarios bonaerense, Claudio Santagati.