Y ahora qué: la segunda autopsia de Daiana Abregú concluyó que no fue suicidio

A pocos días de una masiva convocatoria de vecinos y familiares de Daiana, quienes aún reclaman el esclarecimiento del caso, y de que la justicia liberara a los cinco policías sospechosos, la ciencia dictaminó que la joven fue asesinada.

El informe final de la Asesoría Pericial de La Plata confirmó lo que había señalado preliminarmente: Daiana Abregú no se ahorcó y concluye que murió por asfixia mecánica por sofocación.

El cuerpo de peritos forenses de la Corte Bonaerense, quienes a diferencia de sus colegas federales contaron con todas las pericias complementarias, destacó que en la operación de autopsia no se observan surcos en la piel ni lesiones en los músculos del cuello, compatibles con un lazo de ahorcadura. Además, subrayan que en la zona existen lesiones compatibles con signos de autodefensa.

Las conclusiones a las que arribaron los peritos médico-forenses María Andrea Noms, Rubén Neme y Claudia Becerra, sostienen que “por las livideces dorsales el cuerpo estuvo acostado boca arriba”, contradiciendo la versión policial sobre cómo se encontró la joven.

La Comisión Provincial por la Memoria (CPM), particular damnificado en la causa en calidad de Mecanismo Local de Prevención de la Tortura, había exigido que se realice esta segunda autopsia con la aplicación del Protocolo de Minnesota, luego de presentar un pedido de nulidad del informe pericial del ateneo, realizado por la Policía Federal Argentina (PFA).

El Protocolo de Minnesota es una obligación en las investigaciones de muertes bajo custodia del Estado, que no se cumplió durante la primera autopsia.

Pese a los elementos que incriminan al personal policial, el Ministro de Seguridad, Sergio Berni, avaló públicamente la versión policial, tergiversó hechos y otros elementos de la causa. 

La ciencia finalmente descartó la hipótesis de que la joven Daiana Abregú se haya ahorcado en la celda de la comisaría de Laprida. La nueva autopsia dio por tierra la versión que buscó instalar la Policía Bonaerense desde el primer momento, avalada por la Policía Federal y respaldada por Sergio Berni, Ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires.

Como resultado de las pericias realizadas por los médicos forenses María Andrea Noms, Rubén Neme y Claudia Becerra, se concluyó que “no se observan surco de ahorcadura ni lesiones traumáticas en el cuello y vía superior: no se constató alteraciones en laringe, hueso hioides indemne, corroborado por examen radiológico”, detalla el informe.

El informe final se conoció este viernes y destaca una serie de irregularidades de la primera autopsia: no se examinó la base del cráneo, el corazón y tampoco se realizó incisión para estudiar el cuello. Por la ausencia de estos estudios cuestiona el informe de la PFA, que había determinado la causa de muerte por “un paro cardíaco por asfixia mecánica”.

“El paro cardiaco no es una causa de muerte, solo una descripción de que el corazón está detenido. En relación a la asfixia mecánica, no se interpreta cómo se llegó a esta conclusión cuando el cuello no fue estudiado, ni fueron descriptas características asfícticas en los demás órganos”, precisaron los peritos judiciales.

Hay otros elementos que contradicen la versión de la bonaerense, que afirma que la joven madre se ahorcó con su propia campera en locutorio del sector de calabozos.

Las nuevas pericias confirman que “el surco de ahorcadura no se observó en la reautopsia ni en las fotografías de la primera autopsia”. Además, advierte que, “a pesar de ser habitual en este tipo de casos, tampoco quedaron marcas de la trama de la tela de jean de la campera”.

La nueva operación de autopsia destaca que “se aprecian excoriaciones en la cara anterior del cuello que podrían corresponder a lesiones de defensa de la víctima”.

Otro detalle que confirma el homicidio es la ubicación del cuerpo al momento del deceso. El informe de los médicos de la Corte Suprema Bonaerense señala que las livideces en la espalda respetan las zonas de apoyo, “con lo cual se deduce que la víctima estuvo en esa posición, decúbito dorsal y permaneció en ella. No coincidiendo con la posición pretendida en ambas descripciones de posición de semi-suspensión o suspensión de la víctima”.

La ciencia confirmó que el cuerpo estuvo acostado boca arriba cuando se produjo la muerte.

Las conclusiones de la autopsia no dejan dudas sobre cómo murió Daiana Abregú

“La modalidad de la misma, teniendo en cuenta: la ausencia de surco de ahorcadura, la ausencia de lesiones traumáticas en vía aérea superior, paquetes asculonerviosos, la presencia de excoriaciones equimóticas tangenciales, algunas de ellas sangrantes en cara anterior del cuello compatibles con maniobras de defensa de la víctima, conforman un cuadro compatible con asfixia mecánica por sofocación”, explica.

“Por lo expuesto se concluye que la muerte de quien en vida fuera Daiana Soledad Abregú, de 26 años de edad, se produce a consecuencia de un edema hemorrágico pulmonar a partir de un Síndrome general asfíctico provocado por una asfixia mecánica por sofocación”, dictaminaron los peritos médico-forenses.

Todos somos Daiana

El fiscal Juan Ignacio Calonje recibió los resultados de la nueva operación de autopsia, a la que se había opuesto, luego de otorgar la libertad de los cinco policías vinculados a la causa. La cuestionada decisión la sostuvo a partir del informe preliminar, viciado de nulidad y poco serio, realizado por los peritos de la Policía Federal.

Los informes de los peritos de parte, Emma Virginia Creimer y Fernando Rossi, cuestionaron fuertemente el contenido y la forma en que se confeccionó el realizado por la PFA.

La Comisión Provincial por la Memoria y la familia Abregú, este viernes presentaron conjuntamente el planteo de nulidad de lo actuado por los peritos de la fuerza federal.

“El fiscal ya había sido advertido, la Policía Federal no resultaba objetiva ni imparcial. Esto se confirmó en el informe presentado, que debe considerarse nulo por la extralimitación en la labor de los peritos que se apartaron de lo requerido, e impidieron la tarea de los peritos presentados por la CPM y la familia Abregú, avanzando en valoraciones carentes de fundamentos científicos”, sostuvieron representantes de la CPM.

Además de pedir la nulidad del informe, se insistirá con la realización de una nueva junta de peritos bajo la órbita del Cuerpo Médico Forense de la Justicia Nacional.

El fiscal Calonje había rechazado el pedido de la querella para que el ateneo de peritos se realice en sede judicial, también se había opuesto a la realización de una nueva autopsia, a sabiendas que en la primera no se había respetado el Protocolo de Minnesota.

En una incómoda posición se encuentra el Ministerio de Seguridad, dirigido por Sergio Berni, quien: "Sin conocer los detalles de la causa, enunció públicamente una serie de imprecisiones y acusaciones a la CPM, tendientes a ocultar la verdad y consagrar la impunidad policial", afirmaron desde la Comisión.